Maestros afiliados a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) tomaron ayer, por segundo día consecutivo, las alcaldías y las tesorerías municipales de las 22 regiones sindicales de Michoacán, así como las casetas de cobro de Panindícuaro y Zinapécuaro en la autopista México-Guadalajara, para exigir que el gobierno del estado, encabezado por el perredista Silvano Aureoles Conejo, pague a 32 mil profesores la segunda quincena de julio, bonos y prestaciones.
El dirigente estatal de la CNTE, Gamaliel Guzmán, manifestó que sólo en educación básica se adeudan 3 mil 500 millones de pesos, además de mil 500 millones al personal docente de niveles medio y superior.
“Hay total inconformidad con el mandatario porque, lejos de buscar alguna solución para realizar la erogación salarial, se ha dedicado a otras actividades que no le competen durante las últimas dos semanas”, indicó.
Recalcó que le quedan menos de dos meses a la actual administración y “no se observa ninguna intención de resolver esta situación, por lo contrario, cada vez más son los empleados estatales que se suman a las filas de inconformes por pagos incompletos o nulos”.
Guzmán anunció que este viernes habrá una concentración masiva en Morelia porque los maestros “viven al día” y no pueden esperar hasta el 12 de agosto, fecha en que la Secretaría de Finanzas estatal aseguró que se pagarán los sueldos.
Asimismo, externó que están en espera de que sindicatos de bachillerato, universidades y tecnológicos del estado se sumen a las movilizaciones porque todo parece indicar que Aureoles Conejo pretende heredar este conflicto al gobernador morenista electo Alfredo Ramírez Bedolla.
En Colima, el mandatario estatal, Ignacio Peralta Sánchez, dio a conocer ayer por la tarde que fue pagada sólo la mitad de la quincena que se adeudaba a cerca de 5 mil trabajadores de su administración.
“Sé que no es suficiente, pero seguimos trabajando para encontrar cuanto antes la solución definitiva", difundió en un mensaje en sus cuentas de redes sociales.
El líder sindical de los burócratas en este estado, Martín Flores Castañeda, confirmó que esta medida es insuficiente, adelantó que los afectados procederán con denuncias penales y pidió la renuncia del gobernante de extracción priísta.