Cuiabá. Sin brillar, Chile firmó ayer su presencia en los cuartos de final de la Copa América al empatar 1-1 con Uruguay en la tercera fecha del Grupo A, un resultado que le da oxígeno a la Celeste tras debutar con una derrota ante Argentina.
El ex jugador de Tigres Eduardo Vargas (27) y Luis Suárez (67) marcaron los goles en la Arena Pan-tanal, donde La Roja se mostró enfocada pese al incidente protagonizado por varios jugadores el pasado jueves, cuando violaron el protocolo sanitario del torneo con la presencia de un peluquero en el hotel de concentración en Cuiabá.
Apenas un ataque serio le bastó a Chile para poner a temblar al técnico de Uruguay, Óscar Washington Tabárez, por una defensa lenta e insegura, que la pasó mal durante todo el partido cuando fue atacada en velocidad.
Con cinco hombres en la media cancha, La Roja supo contener el impulso inicial de la Celeste, muy activa con Giorgian De Arrascaeta y Edinson Cavani para inquietar al portero rival Claudio Bravo.
Fue así como al minuto 27 Chile logró el 1-0; una exquisita pared entre Vargas y Ben Brereton, quien devolvió con precisión al Turboman para que éste prendiera motores al entrar al área grande y empalmar de derecha un sablazo imposible para el guardameta charrúa Fernando Muslera.
Éste fue el decimocuarto gol de Vargas en Copa América, con el que alcanzó al peruano Paolo Guerrero en el palmarés de los máximos artilleros del torneo en activo.
Ahora se ubica a tres tantos de los goleadores históricos, el brasileño Zizinho y el argentino Norberto Tucho Méndez.
La reacción de Uruguay fue tímida, sin fluidez en el medio campo y con un Luis Suárez apagado y errático cuando quiso entrar en juego.
La necesidad de los charrúas llevó a su técnico, Óscar Washington Tabárez, a dos cambios para encarar la segunda mitad: Nahitan Nández por Giovanni González y Martín Cáceres por Nicolás de la Cruz.
El módulo de la Celeste cambió con tres defensas y cinco volantes, el mismo esquema que Chile propuso desde el inicio del partido. Uruguay ganó en juego asociado y posesión, pero carecía de claridad para fabricar situaciones de gol.
Fue entonces cuando el equipo charrúa sacó a flote ese ADN de voluntad y combatividad, la fórmula con la que logró la igualdad al minuto 67 gracias a Luis Suárez, un tiro de esquina que Matías Vecino peinó en el primer palo y encontró al del Atlético de Madrid en el segundo para empalmar cayéndose ante la marca de Arturo Vidal, aunque la Conmebol lo contó como autogol por parte del chileno.
El empate le sentó bien a un partido tenso y ríspido, en el que La Roja fue superior en la primera parte, mientras la Celeste se recompuso con los cambios en el segundo tiempo.
Por su parte, Argentina también consiguió el boleto a los cuartos de final del certamen de la Conmebol al vencer 1-0 a Paraguay, ayer en un partido muy reñido en el que los guaraníes merecieron más, disputado en Brasilia.
Alejandro Goméz anotó el único gol de la Albiceleste al minuto 9, para convertir al equipo de Lionel Messi en el segundo clasificado de su sector.
Paraguay, sin cambios en el esquema de su técnico, Eduardo Berizzo, le quitó el dominio a su rival, poniendo resistencia en un duelo por momentos áspero. Pero no le alcanzó para ganar y deberá seguir en la pelea.
Messi alcanzó en este cotejo un nuevo récord al cumplir su presentación internacional número 147 en el seleccionado mayor de Argentina, empatando al ya retirado Javier Mascherano.
Con estos resultados, Argentina acumuló siete unidades para colocarse en la primera posición del Grupo A, mientras Chile llegó a cinco puntos y se ubicó en el segundo sitio.
Paraguay ocupa el tercer escalón, con tres puntos, seguido de Uruguay, que apenas acumula una unidad, y Bolivia, que aún no ha sumado.
El próximo jueves, en la cuarta fecha del sector, Uruguay se jugará sus restos ante Bolivia en Cuiabá, mientras Chile se verá las caras con Paraguay en Brasilia. Argentina descansará.