Moscú. La red de oficinas regionales del opositor ruso Aleksei Navalny anunció el jueves su disolución ante la amenaza de ser declarada extremista, al tiempo que su encarcelado líder apareció en una audiencia judicial por video, demacrado, con el cráneo afeitado y vestido como presidiario.
"Ayer me llevaron al baño (…) Había un espejo, me miré: soy un esqueleto horrible", dijo el opositor en una grabación de audio difundida por el canal de televisión independiente Dojd.
El opositor compareció en la audiencia de apelación de un caso de difamación contra un veterano de la Segunda Guerra Mundial.
La apelación del activista anticorrupción fue finalmente rechazada y su multa de 850 mil rublos (11 mil 440 dólares) confirmada.
Su abogada, Olga Mijaílova, anunció su intención de llevar el caso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, mientras que Navalny acusó a los jueces de "traidores" en su declaración final.
Paralelamente, el jueves se celebró otra audiencia en la que se examinó la solicitud de la fiscalía de que el Fondo de Lucha contra la Corrupción (FBK) del opositor y sus oficinas regionales fueran declarados "extremistas".
Si se acepta esta solicitud, sus actividades quedarían prohibidas y los miembros del FBK o sus simpatizantes serían amenazados con largas penas de prisión.
Investigaciones sobre corrupción
Los debates deben reanudarse el 17 de mayo, pero sin esperar, Léonid Volkov, el director de la red regional del opositor, anunció su disolución en un video publicado en las redes sociales, indicando que algunas de esas 37 oficinas seguirían funcionando de manera independiente.
"Estamos disolviendo oficialmente la red de Alexéi Navalni", dijo Vólkov en el video.
Esta semana, un tribunal de Moscú ya prohibió al FBK prácticamente todas sus actividades, como la publicación de contenidos en internet, la organización de manifestaciones y la participación en elecciones.
Si son declaradas "extremistas", las organizaciones de Navalni se unirían a una lista de unas 30 más prohibidas en Rusia, como el grupo yihadista Estado Islámico (EI) o los Testigos de Jehová.
Fundado en 2011, el FBK es conocido por sus investigaciones sobre la corrupción en los círculos de poder en Rusia.
La más resonante, publicada en enero, acusaba al presidente Vladimir Putin de haberse hecho construir un palacio sobre el Mar Negro. Vista 116 millones de veces en YouTube, había obligado a Putin a desmentir personalmente.
Las 37 oficinas de Navalny en toda Rusia también difunden sus propias encuestas y organizan las campañas de "voto inteligente" que defiende el opositor.
Las autoridades han redoblado la presión sobre los simpatizantes de Navalni desde su regreso a Rusia, y muchos de sus aliados abandonaron el país o se encuentran en arresto domiciliario.
El jueves, un tribunal ruso condenó a un ex coordinador de las oficinas de Navalny en la ciudad de Arcángel (norte) a dos años y medio de prisión, acusado de difundir pornografía al compartir un videoclip del grupo de metal alemán Rammstein en redes sociales.
Activista anticorrupción y enemigo acérrimo del gobierno actual, Navalny está encarcelado desde marzo por un caso de fraude, calificado de político por muchas oenegés y capitales occidentales.
Ante el empeoramiento de su salud, la semana pasada puso fin a una huelga de hambre de 24 días para protestar por sus condiciones de detención.