Caracas. Dos militares venezolanos murieron y nueve más resultaron heridos por la detonación de una mina antipersona durante operaciones para confrontar a “grupos armados irregulares colombianos” en una zona fronteriza, informó ayer el Ministerio de la Defensa de la república bolivariana.
El 21 de marzo, militares de Venezuela lanzaron una ofensiva contra grupos armados ilegales de Colombia en La Victoria, poblado del fronterizo estado de Apure, y en los enfrentamientos murieron dos uniformados venezolanos. Los choques han llevado al desplazamiento de unas 5 mil personas al vecino país.
En un comunicado, el Ministerio de Defensa indicó que dos oficiales fallecieron por “la detonación de una mina activada” y nueve más son atendidos por heridas provocadas por la explosión. El ministerio agregó que durante las operaciones las tropas desmantelaron nueve campamentos, incluido uno que producía pasta de coca. Añadió que hay 31 detenidos, quienes fueron puestos a las órdenes de un tribunal militar y además fueron “neutralizados nueve terroristas”, sin ofrecer más detalles.
En tanto, dos periodistas y dos activistas de derechos humanos fueron liberados ayer en la tarde tras haber estado 25 horas detenidos mientras trabajaban en Apure, indicó el sindicato de la prensa de Venezuela en su cuenta de la red social Twitter.
Luis Gonzalo Pérez y Rafael Hernández, periodistas del canal de televisión colombiano NTN24 en Venezuela, junto a dos activistas de la organización no gubernamental (ONG) Fundaredes, fueron “liberados sin presentación” a tribunales en la localidad de Guasdualito, estado de Apure (oeste), detalló Gonzalo Himiob, abogado y director de la ONG de derechos humanos Foro Penal.
Los recientes enfrentamientos de las fuerzas armadas venezolanas contra “grupos armados colombianos” en la zona han resultado en al menos 13 muertos: nueve “terroristas”, según Caracas, y cuatro uniformados fallecidos, incluidos los de ayer.
Además, la fiscalía venezolana dijo haber abierto una investigación sobre el presunto ajusticiamiento de cinco campesinos, denunciado por varias ONG.