Zacatecas. Las cenizas del líder campesino José Refugio Torres López, defensor del territorio conocido como El Magueyal, en la localidad de Tacoaleche, fueron esparcidas en su propia milpa, por sus hijos y esposa, “sembrándolas”, como fue la petición del agricultor, antes de morir de Covid-19, el pasado viernes.
“Quiero que me pisen las llantas de mi tractor, y no los hombres en el panteón”, le dijo Torres López a sus familiares, quienes lo “pasearon” por las calles de su comunidad a bordo de remolque jalado por su viejo tractor Ford, por última vez, en honor a quien peleó por tener un área natural protegida con una superficie de 93 hectáreas, para su gente.
Torres López luchó por convertir El Magueyal –hasta hace unos años tierras de uso común-, en área natural protegida de su comunidad, para lo cual se enfrentó a “las tres García”: la ex gobernadora de Zacatecas por el PRD, Amalia García Medina (2004-2010), a la hija de ella, Claudia Corichi García, y a la madre de la ex mandataria: María Concepción Medina, originarias de esa localidad.
De hecho, en entrevista con este diario, la diputada Alma Gloria Dávila Luévano de Morena y compañera de lucha de Torres López, quién, además, también participó en el homenaje póstumo, recordó que fue la madre de Amalia García Medina, quien boicoteó directamente la lucha del líder campesino.
María Concepción Medina, estuvo casada con Francisco Espartaco García Estrada (padre de Amalia y abuelo de Claudia), quien fuera gobernador de Zacatecas por el PRI (1956 – 1962). La mujer, aseguró la diputada Alma Gloria Dávila Luévano, presionó directamente a los integrantes de la Asamblea Ejidal de Tacoaleche, para que fraccionaran y vendieran las tierras donde se ubica El Magueyal.
Sin embargo, aunque la asamblea ejidal autorizó se fraccione y venda la pretendida área natural protegida, no ha sido vendida, sigue jurídicamente “intacta”, hasta ahora, debido a que el cabildo del municipio de Guadalupe, no ha autorizado el cambio de uso de suelo en el lugar. Por eso muchos habitantes del lugar, mantienen vivo el anhelo de proteger ese territorio como reserva.
Mientras tanto, este fin de semana -la tarde del pasado sábado-, antes de ser esparcidas las cenizas de Torres López, su familia efectuó un ritual campesino en el corazón de El Magueyal, donde antiguamente se encontraban varias “tlachiqueras”, que eran pequeños hornos cavados en la tierra, donde se cocía en casos, con leña, los “jugos del maguey”, con el que se producían agua miel y miel de maguey, que eran comercializados en todo el estado de Zacatecas.
La señora Gina, esposa de Torres López, señaló que el líder campesino tuvo los “mejores recuerdos de su infancia”, en ese lugar, “aprendió hacer aguamiel y miel de maguey con sus padres y abuelos”.
Actualmente, subsisten en Tacoaleche -población ubicada a sólo 25 kilómetros al sureste de la capital de Zacatecas-, 1 mil 150 hectáreas de tierras de uso común, repartidas en varios predios, identificados en la comunidad como El Mezquital, La Verde, Los Cerritos, Los Maniantales, La Niunfla, La Tinaja y Cerro Gordo.