Londres. Un mes después de su salida definitiva del mercado único europeo a raíz del Brexit, el Reino Unido anunció este sábado que pedirá oficialmente la adhesión al tratado comercial transpacífico, integrado por 11 países, entre ellos México, Chile y Perú.
La ministra británica de Comercio Internacional, Liz Truss, formalizará este lunes la solicitud de adhesión al Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP, por sus siglas en inglés), del que también forman parte entre otros Australia, Canadá, Japón y Vietnam.
El CPTPP es la nueva versión del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés) del que se retiró el expresidente estadounidense Donald Trump.
Las negociaciones entre Londres y los miembros del CPTPP deberían comenzar este año, precisó este sábado el ministerio británico de Comercio Internacional en un comunicado.
La decisión llega un año después de que el Reino Unido abandonara oficialmente la Unión Europea, tras 47 años de relación tormentosa. Londres obtuvo un período de transición hasta el 31 de diciembre de 2020, durante el cual los británicos siguieron aplicando las reglas de la UE antes de abandonar el mercado único y la unión aduanera europea.
A finales de diciembre se alcanzó un acuerdo de libre comercio, tras arduas negociaciones, entre Londres y Bruselas para regular sus relaciones tras la ruptura histórica.
Antes, en octubre pasado, Londres firmó su primer gran acuerdo comercial bilateral posterior al Brexit con Japón. En diciembre, firmó otro de libre comercio, esta vez con Singapur, una importante plataforma financiera y miembro de la ASEAN (Asociación de Naciones del Sudeste Asiático) y del CPTPP.
"Postular para convertirnos en el primer nuevo país que se une al CPTPP demuestra nuestra ambición de hacer negocios en las mejores condiciones con nuestros amigos y socios en todo el mundo y de ser un campeón entusiasta del libre comercio global", se congratuló el primer ministro británico Boris Johnson.
"Forjamos nuevas asociaciones que aportarán enormes beneficios económicos al pueblo del Reino Unido", dijo.
— "Sin consulta pública" -
Una adhesión al tratado ofrecerá "enormes oportunidades", estimó Liz Truss. "Significará tasas de aduana más bajas para los fabricantes de automóviles y los productores de whisky y un mejor acceso para nuestros excelentes proveedores de servicios, lo que generará empleos de calidad y más prosperidad para la gente aquí", agregó.
Karan Bilimoria, presidente de la CBI (Confederation of British Industry) - la principal organización patronal británica - aplaudió, por su parte, una iniciativa que abre "un nuevo capítulo en nuestra política comercial independiente", ya que una adhesión al CPTPP tiene "el potencial de crear nuevas oportunidades para las empresas británicas en diferentes sectores".
El tono es menos entusiasta entre la oposición laborista. Su responsable para el comercio internacional, Emily Thornberry, afirma que su partido estudiará de cerca las modalidades de la adhesión al pacto comercial.
"Actualmente Liz Truss ni siquiera puede garantizar si tendremos derecho a vetar la adhesión propuesta por China si nos unimos al bloque primero", argumentó.
China anunció en noviembre que examinará la opción de adherirse al CPTPP.
Después de cinco años de debate sobre el Brexit, los británicos se preguntarán por qué el gobierno "se apresura a unirse a otro (bloque comercial) en la otra punta del mundo sin ninguna consulta pública significativa", apuntó Emily Thornberry.
El CPTPP se lanzó en 2019 para suprimir las barreras comerciales entre los 11 países que lo componen y que representan a casi 500 millones de consumidores en la región de Asia y el Pacífico. Su objetivo también es contrarrestar la creciente influencia económica de China.