Los Ángeles., El legendario productor musical estadunidense Phil Spector murió el sábado a los 81 años, informó el Departamento de Penitenciarías de California, ya que cumplía condena por un homicidio.
El productor que introdujo métodos innovadores, como la muralla de sonido, trabajó con estrellas como Los Beatles en su álbum Let it Be.
Estaba en la cárcel por el asesinato de la comediante Lana Clarkson en 2003 tras una noche poco clara en su mansión de California.
En su apogeo, en los años 60, era el rey indiscutido de los productores del pop y el rock, cuyo trabajo ayudó a definir el optimismo ilimitado de una generación.
Spector había sido elogiado como visionario por canalizar la ambición wagneriana a la canción de tres minutos de duración, creando la muralla de sonido, que fusionó animadas armonías vocales con fastuosos arreglos orquestales para producir monumentos del pop.
Su secreto: una sobreposición de sonidos con saturación de instrumentos, voces y efectos, que cambió la forma en que se grababan discos pop. Al resultado lo llamó “pequeñas sinfonías para los niños”.
Nacido en Nueva York en 1939 en una familia judía de origen ruso, Spector solamente tenía ocho años cuando su padre se suicidó, tragedia que lo marcaría para siempre. Su madre decidió que se mudarían a Los Ángeles.
Formó su primer grupo The Teddy Bears con tres amigos de secundaria y conoció el éxito casi de inmediato con la canción de 1958 To Know Him Is to Love Him, epitafio en la lápida de su padre.
La canción llegó al número uno de la lista de Billboard y vendió cinco millones de copias.
El grupo no fue capaz de repetir el éxito y se desarmó al año siguiente. Muy afectado por el pánico escénico, Spector derivó lentamente hacia la producción y la composición, y ayudó en la autoría del éxito de Ben E King Spanish Harlem en 1961. La creación de su propio sello, Philles, fue el comienzo de una era dorada.
Wagner en el rock
Apelando a un gran número de músicos que tocaban sólo sus intervenciones en cada canción, las colocaba en capas una sobre otras; esta técnica brindó una calidad orquestal única a sus producciones.
La describió alguna vez como un “acercamiento wagneriano al rock n’roll, pequeñas sinfonías para niños. Sabía que Beethoven era más importante que cualquiera que tocara su música. Es lo que yo quería ser”.
Gracias a su trabajo con Los Crystals, Las Ronettes y Los Righteous Brothers, Spector se convirtió en una máquina de éxitos musicales, con títulos clásicos como Da Doo Ron Ron, Then He Kissed Me, Be My Baby, You've Lost That Lovin’ Feelin y Unchained Melody.
Los últimos artistas que firmaron para el sello Philles fueron Ike y Tina Turner en 1966, pero Spector se llevó una sorpresa cuando la canción River Deep-Mountain High sólo alcanzó el sitio 88.
Se casó con Ronnie Bennett, voz principal de las Ronettes y en 1968 se alejó de la vida pública convertido en multimillonario.
Regresó a inicios de los años 70 para hacer una colaboración triunfal con Los Beatles en su álbum Let it Be y luego produjo álbumes solistas para John Lennon (Imagine) y George Harrison (All Things Must Pass).
A medida que avanzaban los años 70 se volvió cada vez más huraño y fue cuando comenzaron a esparcirse rumores sobre sus excentricidades. Ronnie, quien lo abandonó en 1974, relató en su autobiografía que sufrió años de abusos, incluidas amenazas de matarla y de exhibir su cuerpo en un ataúd decorado con oro que guardaba en el sótano.
Sus amenazas con armas se extendieron a los artistas con los cuales trabajaba. Presuntamente disparó un arma en un estudio cuando producía Rock ’n Roll para John Lennon y puso otra en la cabeza de Leonard Cohen durante las sesiones de Death of a Ladies Man.
En otro incidente, tomó a The Ramones de rehén a punta de pistola cuando grababan su álbum End of the Century.
Algunas claves sobre la atribulada personalidad de Spector salieron a luz en una rara y extensa entrevista con el diario británico The Daily Telegraph, semanas antes de que Lana Clarkson muriera en su mansión en febrero de 2003.
“Soy mi peor enemigo. Tengo demonios en mí que me desafían”, dijo. “La gente me idolatra, quieren ser como yo, pero les digo ‘créanme, ustedes no quieren mi vida’ porque no ha sido muy placentera”.
Con información de Ap