Toluca Mex. Cientos de trabajadores de la industria restaurantera se manifestaron este lunes frente a la sede del Poder Ejecutivo del estado de México para exigir que se les permita operar, pues expresaron que las condiciones económicas que enfrentan por las restricciones debido a la pandemia de Covid-19 ya son insostenibles, y de permanecer en la situación actual varios negocios tendrán que cerrar.
A la fecha, aseguraron, más de 10 mil establecimientos de este tipo han dejado de forma definitiva de ofrecer sus servicios en la entidad por el impacto económico que les han provocado las medidas dictadas por la autoridad que prohíben la operación normal de bares y restaurantes mientras el semáforo epidemiológico se encuentre en color rojo.
La mayoría de los negocios de este giro han tenido que reducir personal y otros ya no obtienen recursos ni para la renta de los locales.
Propietarios, meseros, garroteros y cocineros se congregaron en la Plaza de los Mártires de Toluca para realizar lo que denominaron “Cacerolazo, abrimos o cerramos”.
La protesta obligó al cierre de la avenida Lerdo, en el centro de Toluca y señalaron que se mantendrán frente a Palacio de Gobierno hasta que alguna autoridad los pueda recibir.
Los inconformes demandaron apoyo pues aseguran que ha sido uno de los sectores más perjudicados durante la contingencia.
“Muchos recurrimos a créditos el año pasado para no cerrar, pero ya no es posible endeudarse más; además, los periodos de gracia con los acreedores han terminado. Tenemos el agua hasta el cuello porque debemos seguir pagando no sólo los créditos sino también los impuestos y las licencias que exige la autoridad y con las puertas cerradas es imposible sobrevivir”, señaló una mujer dueña de un restaurante en Metepec.
Algunos empleados señalaron que a pesar de esta apremiante situación no han recibido apoyo de ningún gobierno.
“Se ha apoyado a otros sectores, pero a este, que es esencial en la economía, no lo han volteado a ver. Vemos con enojo y frustración que mientras nosotros sufrimos penurias, el comercio informal de venta de comida sigue operando”, indicó un cocinero con cacerola en mano.
Los manifestantes anunciaron que a partir de mañana se realizarán “cacerolazos” a las 13:00 horas en cada uno de los establecimientos, para que no sólo la autoridad se entere de esta situación, sino la propia ciudadanía.
Mencionaron que los restaurantes han tomado y adoptado todas las medidas de prevención y cuidado para evitar la propagación de contagios, por lo que no entienden cuál es la razón por la que se les impide operar.