Domingo 23 de febrero de 2025, p. 4
Los conceptos de deseo, libertad e invisibilidad planean sobre los personajes de La cicatriz de la sirena (Universidad Autónoma de Nuevo León), sostuvo el fotógrafo y escritor César Saldívar sobre su libro de cuentos más reciente.
El también cineasta explicó a La Jornada que su estilo de escritura y sus obras en el cine y en la fotografía tienen un tono y una búsqueda humanista; es una bandera de humanismo, donde se aspira a la libertad de ser, elegir, vivir y amar
.
Añadió que hay una invisibilidad permanente
sobre los protagonistas de su volumen, que se presentó ayer en la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería (FILPM).
Saldívar ejemplificó con el cuento La cicatriz de la sirena
, en el que una persona llega travestida y desangrándose a casa de su abuela. Ella “está sorprendida, porque ni se imaginaba que su nieto fuera travesti. Otro personaje es un niña que se traviste… y la invisibilidad del hijo, en el relato ‘Saturno’, que ve a su padre que tiene una relación con su amigo. También ahí hay una invisibilidad de una relación y de una identidad.
“Un cuento que me gusta mucho, ‘Los jazmines’, es de un hombre que se negó la sexualidad toda su vida y al final vuelve a una cantina a la que iba de joven, pero decidió casarse, ser millonario y crecer en la sociedad, para al final estar solo y en una crisis por no saber defender su vida. O sea, otra invisibilidad”.
El narrador describió el texto como poseedor de un “tono humanista y de reflexión social, más que un libro gay o queer. Toca estos temas sin caer en ese abismo y marginación, porque otra de mis luchas es que los libros, como la vida, la música, el cine y todo, cuando se clasifican se marginan de algo universal.
Si digo música negra, la llevo a un segmento o a una minoría. La mayoría siempre es blanca, heterosexual y machista. Esa lucha de nuestra generación y este momento contemporáneo está manifestada en todas estas búsquedas y deseos.
Saldívar comentó que hay elementos incómodos en su escritura, como en el cuento Autorretrato
, en el que “se ficciona al primer hijo de vientre de alquiler de una pareja de hombres en los años 80 del siglo pasado. Estoy figurando qué tipo de circunstancias le tocó vivir. Es un tema de reflexión, de pensamiento y para mucha gente que está en favor del tema, incómodo.
Evidentemente, es una reflexión y cada uno es libre de apoyar o pensar. En mi bandera no cabe una mujer explotada en ningún sentido, y ahí se manifiesta, más allá de los abusos del hogar y económicos, la del cuerpo para alquilar un vientre que la va a dejar llena de hormonas, trastocada, deformada.
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César Saldívar añadió que sus libros, pueden ser incómodos o muy liberadores, porque a lo mejor no se había puesto en perspectiva un pensamiento, aunque lo vivimos todos los días
.
Hizo énfasis en que su intención con este proyecto literario era crear personajes vinculados con la identidad, la sexualidad y la diversidad, sin caer en las banderas de este movimiento LGBT, al cual respeto mucho y apoyo
.
Sobre el título, La cicatriz de la sirena, el narrador recordó que se enamoró de esas palabras y tuvo que hacer el relato correspondiente: “Tuve que justificar lo que era la sirena: este nieto que llega malherido a casa de su abuela y que en su delirio de agonía empieza a decir ‘yo soy una sirena, yo soy una sirena ¿Dónde está el mar?’”
Reflexionó la interesante figura de la sirena: la mujer pez que, “además de que es deseada, es satanizada, porque es tan bella que te seduce; es casi diabólica. Si la analizas, es la belleza total que arrastra. ‘La cicatriz de la sirena’ es el cuento más mexicano; es muy barroco, porque hay una escena muy bella en la que, para curarla, la abuela llena el cuerpo de la nieta de estampitas religiosas. Eso lo veo muy cinematográfico”.
Saldívar reseñó que sus historias se entrelazan. “Veo este universo mío danzando entre sí. Personajes que empiezan a cruzar la frontera de otros. Por ejemplo, hay una chica trans malherida y, de repente, hay una chica trans en la morgue. A la mejor es la misma”.
También está el chico de Puerto Vallarta
, que es invitado a esa playa por un hombre y luego se asusta de lo que ve y regresa a su casa diciendo: ‘Me voy a casar, voy a buscar una buena mujer y voy a tener hijos’. De repente este chico que no se atrevió puede ser aquel personaje que a los 60 años se arrepiente de haberse casado. El rompecabezas de los personajes se va configurando”.
El escritor concluyó: son temas que considero con un fondo sociológico importante. En mi trabajo fotográfico, en mi cine y ahora en mis libros siempre hay un fondo sociológico que retrata cómoda o incómodamente el hoy. El vientre de alquiler, las fronteras, la transexualidad, la transexualidad geriátrica... Me interesan mucho los temas que nos están definiendo como sociedad
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La cicatriz de la sirena también tendrá una presentación el 16 de marzo en la Universidad Autónoma de Nuevo León, en la feria UANLeer, con la participación del actor Alberto Estrella. Después se realizarán lecturas dramatizadas, en la actividad llamada Convergencias, desde el 30 de marzo, en Monterrey.