Martes 18 de febrero de 2025, p. 5
Con la obra El don del Quijote, la compañía Titirimundi Marionetas, formada por Horacio Merchan y Rosina Larrañaga, invita al público infantil a redescubrir el poder transformador de los libros a través del clásico universal de Miguel de Cervantes Saavedra.
Este montaje, dirigido a niños de siete años en adelante, se presenta los sábados en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico. La puesta en escena, escrita, dirigida e interpretada por Larrañaga y Merchan, toma dos pasajes emblemáticos de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha: La aventura con los leones y El retablo de maese Pedro.
Los marionetistas adaptaron el texto de Miguel de Cervantes porque les pareció interesante llevarlo a todo el público, por ser una historia que explora la naturaleza humana, la amistad y los principios. La obra es hermosa, pero de difícil lectura, por lo que creamos una adaptación divertida y accesible con un lenguaje sencillo y muchas imágenes y movimientos
, indicó Merchan a La Jornada.
Sobre la adaptación, Rosina Larrañaga explicó: “Tomamos los episodios de Los leones y El retablo de maese Pedro por ser historias divertidas y propicias para los niños; son simpáticas y emocionantes”.
En esta producción, don Quijote, Sancho Panza y otros personajes cuentan su historia de forma divertida y dinámica, resaltan la importancia de leer y revelan la gran magia que pueden contener los libros. El proyecto presenta dos cuadros escénicos que trasladan al espectador a la España del siglo XVII mediante técnicas de teatro de títeres, como marionetas de hilo, de mesa y libros pop-up.
Merchan consideró que las marionetas son una herramienta educativa valiosa. Se han usado mucho en cuestiones pedagógicas y tienen un atractivo especial, casi mágico. Los títeres tienen la capacidad de llamar y mantener la atención de la gente. Hay muchas situaciones en las que se usan y la gente se siente cómoda hablando con ellos, más que con una persona
.
El fundador de Titirimundi reflexionó sobre la evolución del arte de la marioneta. Cuando empezamos, en los años 90, las figuras de hilos eran vistas como espectáculo elemental y básico para niños. A partir de finales de los años 80, los títeres han adquirido otro rango y se consideran más serios. Se empezaron a crear espectáculos para adultos y los infantiles se hicieron de muy alta calidad, con una intención más seria que sólo divertir y hacer reír
.
La compañía presenta en el primer cuadro a un audaz don Quijote que se enfrenta a un león, a pesar de las advertencias del leonero y de Sancho Panza. En el segundo, el Caballero de la Triste Figura asiste con Sancho a un espectáculo caballeresco del titiritero maese Pedro, cuya función provoca situaciones cómicas que confunden al caballero.
La propuesta, según Rosina, “invita a todos a leer Don Quijote y, en general, a fomentar la lectura. La moraleja final es acercarse a los libros, que están llenos de magia y cosas interesantísimas”.
El montaje cuenta con un equipo creativo conformado por Rosina Larrañaga y Horacio Merchan, quienes se encargaron del guion, la dirección, la producción, la manipulación, el diseño y la producción ejecutiva. Las voces están a cargo de Larrañaga, Blazko Scaniglia, Eduardo Javkin y Merchan, mientras la música original es de Roberto Morales.
El don del Quijote estará en cartelera hasta el 2 de marzo, los sábados y domingos a las 13 horas en el Foro La Gruta del CCH (avenida Revolución 1500, colonia Guadalupe Inn).