La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) confirmó que levantará los sellos de suspensión precautoria a dos hornos de la recicladora Zinc Nacional, colocados por el gobierno de Nuevo León, a fin de revisar las instalaciones de la empresa, tras las denuncias que recibió por contaminación con metales pesados en el municipio de San Nicolás de los Garza.

Consultada por La Jornada sobre el tema, la dependencia indicó que es importante explicar que el manejo de residuos peligrosos y de emisiones a la atmósfera es competencia de la Federación. Aseguró que conversó con la autoridad ambiental de Nuevo León y ambas instituciones acordaron que la suspensión precautoria de los dos hornos será levantada en cuanto comience la revisión de la procuraduría.

Para que la Profepa haga la visita de inspección y verifique el tema de contaminación con residuos peligrosos es necesario que no esté clausurado. Esto, dijo, impediría llevar a cabo la diligencia que es mandato y responsabilidad de la autoridad federal.

Martín Soto Jiménez, investigador del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la Universidad Nacional Autónoma de México en Mazatlán, afirmó que la recicladora Zinc Nacional ha contaminado San Nicolás de los Garza con arsénico, cadmio, plomo y zinc al reprocesar residuos y chatarra que importa de Estados Unidos.

Tras realizar un estudio con la organización Quinto Elemento Lab y el diario británico The Guardian, entre 2023 y 2024, el especialista refirió que esta situación se debe a que en Estados Unidos estos procesos están prohibidos y violar las restricciones implica pagar costosas multas.

La Profepa confirmó que impuso en 2020 a la compañía una multa de 15 millones de pesos por 49 anomalías relacionadas en su desempeño industrial.