Buenos Aires. Una luz esperanzadora en un clima enrarecido fue el anuncio de las Abuelas de Plaza de Mayo ayer sobre el hallazgo del nieto número 138, hijo de Marta Enriqueta Pourtalé y Juan Carlos Villamayor, militantes políticos secuestrados el 10 de diciembre de 1976 en la ciudad de Buenos Aires durante la dictadura militar (1976-1983).

Con las muestras de ADN reunidas por la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad, la búsqueda llevó mucho tiempo, pero al fin el juez Daniel Rafecas informó que se identificó al nieto 138, quien nació en el Centro Clandestino de Detención de la ex Escuela de Mecánica de la Armada (Esma), donde se encuentra hoy el museo y archivo de la memoria, entre otros organismos de derechos humanos.

Marta Enriqueta estaba embarazada de nueve meses cuando fue secuestrada con su compañero, ambos de la organización Montoneros, y su hijo nació en la temible maternidad de la Esma. Ahora tiene 48 años y su abuela es Rosa Poutalé. Asimismo, en el edificio del Esma, miles de manifestantes protestaron por el despido de trabajadores debido a la intención del actual gobierno de cerrar organismos estatales y la Secretaría de Derechos Humanos.

En ese acto se denunciaron además violaciones contra los familiares de las víctimas y el intento de dejar en libertad a los condenados por los crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura.

En agosto, el mandatario Javier Milei cerró la Unidad Especial de Investigación de desaparición de niños durante la última dictadura, que formaba parte de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi) –que posibilitó dar identidad a los hijos de desaparecidos y apropiados–, con el argumento de que el organismo vulnera el derecho a la intimidad, invade competencias del Ministerio Público Fiscal y afecta a la división de poderes.

Venezuela acusa a ministros de desestabilización

El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, informó que los ministros argentinos Gerardo Werthein, de Relaciones Exteriores, y Patricia Bullrich, de Seguridad, serán incorporados a la causa que investiga al gendarme Nahuel Agustín Gallo, también de dicha nacionalidad, por intentos de desestabilización y vinculación a acciones terroristas contra Caracas.

Saab agregó que hay evidencia que compromete al gendarme en graves hechos que atentan contra la seguridad venezolana. En la cadena de mando del grupo de terroristas enviados desde Argentina aparece la propia ministra Bullrich, y así consta en el expediente, quien junto al canciller Gerardo Werthein quedaron señalados como personas de interés en la investigación; por lo tanto, serán incorporados a la causa, agregó el fiscal de Venezuela.

Gallo viajó con la autorización de Bullrich y fue detenido al cruzar a Venezuela vía terrestre desde Cúcuta, Colombia, supuestamente para reunirse con su esposa venezolana y su hijo. Sin embargo, las autoridades en Caracas determinaron que el gendarme ocultaba planes criminales bajo el ropaje de una visita sentimental.

Más temprano, Bullrich afirmó en conferencia de prensa en Buenos Aires que Saab miente abiertamente respecto a las actividades de Gallo en el país caribeño.