París. El ugandés Joshua Cheptegei aguardó hasta el último momento para despegar en la pista. Seguir su ritmo fue casi imposible. A pesar de un arranque dominado por los etíopes, el plusmarquista mundial ganó el oro en los 10 mil metros con un registro que le valió el récord olímpico (26:43.14). En el podio lo acompañaron Berihu Aregawi, figura emergente del atletismo (26:43.44), y el estadunidense Grant Fisher (26:43.46).

Luego de haber sido tres veces campeón mundial de la distancia, Cheptegei alcanzó así el título que más vueltas le daba en su cabeza. El vigente monarca olímpico, el etíope Selemon Barega, estuvo de líder la mayor parte de la carrera, pero sufrió con el empuje del ugandés y finalizó séptimo (26:44.48).

En los 100 metros planos, la estrella estadunidense Sha’Carri Richardson, gran favorita al oro olímpico en la categoría, se clasificó sin complicaciones a semifinales.

Alineada en la primera de las ocho series, la velocista texana, de 24 años, estuvo al frente desde el inicio y llegó a la meta en 10 segundos y 94 centésimas. Con la misión cumplida, puede ya pensar en la siguiente fase.

Richardson, vigente campeona mundial de la línea recta, es señalada por casi todos como la gran aspirante a suceder en el palmarés a la jamaicana Elaine Thompson-Herah, ganadora de esta prueba en Río de Janeiro y Tokio, pero ausente en París por una lesión.

Pulverizan marca

En el relevo 4x400 metros mixto, Estados Unidos es aún el rey de la velocidad. Con un crono de 3 minutos 7 segundos y 41 centésimas, el equipo de las barras y las estrellas pulverizó el récord del mundo en las series de acceso a la final.

Vernon Norwood, Shamier Little, Bryce Deadmon y Kaylyn Brown superaron la anterior plusmarca, que estaba también en su poder desde 2023, cuando pararon el reloj en 3:08.80. El Team USA se dio el lujo de participar sin sus principales nombres, por lo que su actuación apunta a ser todavía mejor en la final de este sábado.

Polonia, que consiguió el primer título olímpico en esta prueba hace tres años en Tokio, se clasificó también para la disputa por las medallas, al igual que Gran Bretaña y Países Bajos, esos últimos preservando físicamente a su estrella nacional, Femke Bol, quien no disputó las series.

A pesar de terminar última en su serie preliminar, la afgana Kimia Yousofi envió un mensaje con sólo pisar la pista, abogando por las mujeres en su país después de huir para perseguir su sueño olímpico. La atleta de 28 años giró su dorsal tras cruzar la línea de meta, revelando un cartel que decía educación, deporte y nuestros derechos.

Un rayo en el agua

El nadador francés Léon Marchand es un rayo, un anfibio, el atleta al que una multitud en Francia ha señalado como su nuevo monarca en estos Juegos. Ayer se coronó al conquistar su cuarto oro en la final de 200 metros combinados, batiendo además el récord olímpico de Michael Phelps.

Animado por el delirio del público en el estadio de La Defense, Marchand tomó el control desde la segunda vuelta, estiró su venta-ja en los 50 metros pecho y llegó a la meta con tiempo 1:54,06 minutos, sólo 0.06 segundos por debajo de la marca de 13 años de Ryan Lochte.

El británico Duncan Scott se colgó la plata, más de un segundo por detrás de Marchand, mientras el defensor del título, el chino Wang Shun, se hizo con el bronce.

Con esta victoria, Marchand se convirtió en el primer atleta francés que consigue cuatro oros individuales, y no por equipos, en unos Juegos. Además, es el tercer nadador masculino que lo logra, tras los estadunidenses Phelps y Mark Spitz.

En los 50 libres, el australiano Cameron McEvoy escaló a la cima de las preseas al vencer en la final al británico Benjamin Proud y el francés Florent Manaudou. Asimismo, la nadadora australiana Kaylee McKeown revalidó su corona en 200 dorso con la mejor marca olímpica, por delante de la estadunidense Regan Smith y la canadiense Kylie Masse.

De refugiado a medallista

El bielorruso Ivan Litvinovich, monarca en trampolín de gimnasia, se convirtió en el primer Atleta Neutral Individual (AIN) que se proclama campeón en los Juegos. Bajo la denominación de AIN se agrupan los deportistas rusos y bielorrusos que han sido autorizados a competir, pese a la exclusión de sus respectivos países, consecuencia del conflicto en Ucrania.

La británica Bryony Page sorprendió al ganar el oro en la prueba femenina. La presea de plata fue para Viyaleta Bardzilouskaya, de Bielorrusia, mientras que el bronce para la canadiense Sophiane Methot.

En Bádminton, la jugadora china Huang Yaqiong ganó la presea dorada en dobles mixtos junto a Zheng Siwei, minutos antes de recibir una petición de matrimonio de su pareja fuera de la cancha.