La psoriasis pustulosa peneralizada (PPG), una enfermedad rara que puede llegar a ser grave ya que afecta más allá de la piel y ocasiona complicaciones como dificultad respiratoria aguda, insuficiencia cardiaca, falla renal y sepsis, se presenta hasta en 4.6 personas por cada 10 mil en el mundo y ya fue autorizada una alternativa terapéutica para su atención en el país, informaron especialistas.

La Comisión Federal para la Protección contra Riesos Sanitarios (Cofepris) autorizó el anticuerpo monoclonal específico y estará disponible en el país a mediados de año, explicó Guillermina Muñoz, directora médica de Boehringer Ingelheim México, Centroamérica y el Caribe.

Se trata de una enfermedad sistémica, afecta a todo el cuerpo, que se manifiesta como ampollas que pueden extenderse a toda la superficie de la piel, es altamente dolorosa, incapacitante y afecta la calidad de vida, detalló.

Mencionó que ha investigado la causa y se identificó que hay una sustancia muy elevada en los pacientes, la interleucina-36 (IL-36R), que esta involucrada en la formación de llagas en la piel.

Detalló que la terapia consiste en un anticuerpo monoclonal selectivo que bloquea la activación del receptor de la IL-36R, y el tratamiento controla la enfermedad, en particular los brotes, como las llagas que llegan a ser muy dolorosas.

La PPG es una enfermedad cutánea rara, crónica y potencialmente mortal, se caracteriza por brotes repentinos e intermitentes de pústulas dolorosas no contagiosas por todo el cuerpo cuya permanencia se mantiene por días o semanas, mencionó en conferencia de prensa Guadalupe Villanueva, directora del Centro de Atención en Enfermedades Inflamatorias.

Además del dolor, enrojecimiento de la piel, sensación de quemazón y agrietamiento, esta enfermedad suele acompañarse de síntomas sistémicos como fiebre, dolor de cabeza, debilidad muscular y cansancio extremo.

Este tipo de psoriasis aparece con frecuencia alrededor de los 40 años con una mayor prevalencia en mujeres y durante el embarazo.