"La Jornada del Campo"
Número 183 Suplemento Informativo de La Jornada Directora General: Carmen Lira Saade Director Fundador: Carlos Payán Velver
Mezcales
Corredor Nevado de Colima-Sierra de Manantlán.  Ignacio TorresCorredor Nevado de Colima-Sierra de Manantlán. Ignacio Torres

Alianzas estratégicas para fortalecer el manejo agroforestal del territorio agavero en Jalisco y Michoacán

MILPA AC, Reforestamos México AC www.reforestamosmexico.org

La expansión de cultivos comerciales, particularmente de aguacate y Agave tequilana sigue siendo un factor determinante en los procesos de deforestación del occidente de México, particularmente en las zonas serranas de Michoacán y en el Corredor Nevado de Colima-Sierra de Manantlán en el sur de Jalisco. Esto provoca numerosas consecuencias socioambientales y afecta una superficie territorial cada vez más extensa que homogeneiza el paisaje con la proliferación de huertas de aguacate y monocultivos de agave.

En las últimas dos décadas las huertas aguacateras se concentraron en Michoacán y Jalisco sobre una superficie de 200 mil hectáreas, con el 82.6% (173 mil ha) y 12.5% (26 mil ha) respectivamente. Sin embargo, el crecimiento más acelerado lo ha experimentado Jalisco, que pasó de mil hectáreas sembradas a inicios de la década del 2000, a 30 mil hectáreas recientemente, sobre todo en la región conocida como Sierra del Tigre y alrededor del Complejo Volcánico de Colima.

Este comportamiento hace tanto de Jalisco como de Michoacán, dos de los hotspots en materia de pérdida de cobertura forestal por cambios de uso de suelo, de acuerdo con el informe de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) sobre la tasa bruta de deforestación 2001 – 2018. El escenario se ha venido agravando con la expansión del Agave tequilana que para establecer el cultivo elimina todo remanente de vegetación con maquinaria pesada, y posterior a la siembra de los agaves, aplica herbicidas con base en glifosato para descartar cualquier posible rebrote de vegetación que le haga competencia.

La transformación del paisaje que produce la intensificación agroindustrial se ha vuelto una constante que amenaza la composición y estructura de los ecosistemas forestales, interrumpe y elimina los beneficios ambientales que estos producen, y genera innumerables afectaciones a la agricultura campesina. Una forma de contrarrestar sus efectos es con el fortalecimiento de los sistemas agroforestales tradicionales, mediante el enriquecimiento de los componentes estructurales y funcionales del agroecosistema para mantener una interacción benéfica entre las áreas de cultivo y los relictos de vegetación original, además de la implementación de prácticas de manejo agroecológico para regular la densidad del sistema, intercalando árboles con cultivos productivos y alimentarios.

La estrategia propuesta por Milpa AC y Reforestamos México AC, se basa en el codiseño agroforestal junto con las comunidades campesinas de Zapotitlán de Vadillo, Jal. y Cañada del Agua, Mich. con el objetivo de restablecer y conservar la flora y la vegetación silvestre mediante el manejo agroforestal en los sistemas de producción de la cadena maguey-mezcal, con el fin de contribuir a la restauración integral del paisaje biocultural del corredor Nevado de Colima – Sierra de Manantlán y fortalecer la estrategia de manejo del Área Voluntaria de Conservación “Cañada del Agua” https://www.naturalista.mx/projects/area-voluntaria-para-la-conservacion-canada-del-agua.

El proyecto general se desarrolla de forma participativa, mediante la identificación de las especies de vegetación natural por su nombre común, y la identificación de la estructura y composición arbórea alrededor de las parcelas, apoyados en la realización de talleres de reflexión colectiva para el registro detallado de las especies útiles, de donde se derive un mapeo del área de producción, y en el que surjan varias estrategias de enriquecimiento y diversificación del componente arbóreo de cada parcela, con el fin de fortalecer los corredores de vegetación que se comportan como zona de refugio y conectividad para la fauna silvestre. La importancia de estas isla Tetlanohcan s de vegetación aumenta en el marco de la continua fragmentación del paisaje por la expansión de monocultivos de aguacate y Agave spp. Con este esquema de manejo agroforestal, nos interesa conectar las áreas de cultivo de las parcelas con la vegetación nativa para regenerar la conectividad biológica y la restauración del paisaje.

La propuesta de seguimiento consiste en un conjunto de acciones que sirvan para fomentar la conservación, recuperación y reintroducción de especies arbóreas en la parte productiva y de vegetación natural de cada parcela, con el fin de mejorar su diseño y manejo agroforestal. Esto supone incrementar la cantidad de árboles al interior de los cultivos, en los linderos de las parcelas y en las zonas de transición de las áreas no agrícolas (cañadas, lomeríos), así como en los caminos circundantes al área de producción. Otro de los objetivos de esta propuesta es contrarrestar las tendencias hacia la intensificación productiva (monocultivo) que disminuye la vegetación arbórea, y adicionalmente, esta iniciativa se propone integrar de mejor manera las especies nativas en los sistemas agrícolas. Además de restaurar funciones ecológicas y beneficios ecosistémicos que fortalezcan la resiliencia de estos agoecosistemas y de las familias que los manejan.

La importancia de construir alianzas estratégicas como esta, basadas en metodologías participativas que combinan investigación e incidencia, nos permite el fortalecimiento de las raíces bioculturales del sistema productivo, mientras se promueve la conservación de la biodiversidad mediante la innovación agroecológica. Consideramos que el patrimonio biocultural de los mezcales tradicionales se debe conservar y proteger reconociendo el valor y la importancia del manejo agroforestal. Por lo tanto, un objetivo complementario es el reconocimiento de un producto involucrado en prácticas de conservación y restauración ecológica, que tiene alcances ambientales más amplios en la generación de cold spots o zonas de enfriamiento importantísimas en el contexto del cambio climático. Los beneficios adicionales de este tipo de producción, que tiene un alto sentido de responsabilidad ambiental, deben ser puestos de relieve y reconocidos a lo largo de toda la cadena de valor, particularmente en el proceso de comercialización y, sobre todo, en el consumidor final.

Con esa perspectiva se busca promover certificaciones alternativas, con base en los sistemas participativos de garantía que acrediten las buenas prácticas ambientales, pero también sociales y culturales para fortalecer los sistemas de manejo agroforestal de los territorios agaveros localizados dentro del polígono del Corredor Biocultural del Occidente de México. Este propósito inicia con un proyecto piloto, impulsado por MILPA y Reforestamos, entre dos comunidades productoras de mezcales tradicionales de Jalisco y Michoacán. https://www.reforestamosmexico.org/post/alianzas-para-el-manejo-integrado-del-paisaje-en-el-corredor-nevado-de-colima-sierra-de-manatlán