Lima. Antero Flores-Aráoz, político conservador que integró un gabinete que renunció en 2009 tras una extensa protesta indígena que se saldó con 34 muertos, rindió protesta ayer como nuevo primer ministro de Perú.

En una ceremonia de menos de tres minutos sin acceso a periodistas en el palacio presidencial, el presidente Manuel Merino tomó juramento al abogado Flores-Aráoz.

El primer ministro, de 78 años, dijo que buscará dejar un país ordenado para enfrentar la crisis económica causada por el coronavirus y que el gobierno no adoptará medidas populistas. Añadió que alguien está azuzando las protestas, en referencia a los tres días consecutivos de repudio a Merino.

La policía reportó que antier detuvo a 27 manifestantes y la Asociación Nacional de Periodistas denunció que 16 reporteros fueron agredidos durante la represión con gas lacrimógeno y disparos de perdigones.

La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos informó que su abogado Carlos Rodríguez fue detenido mientras ofrecía asistencia legal a los manifestantes arrestados.

Flores-Aráoz fue ministro de Defensa en el gobierno de Alan García. Renunció en 2009 con el resto del gabinete tras una larga protesta que culminó con 24 policías y 10 indígenas muertos.

Los indígenas rechazaban dos decretos aprobados en el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos que permitían que empresas privadas perforaran los suelos de las comunidades en busca de petróleo y gas. Tras la matanza los decretos fueron derogados.

Merino fue presidente del Congreso hasta el lunes, cuando fue destituido el mandatario Martín Vizcarra por una acusación de corrupción no comprobada.

Ningún país ha enviado felicitaciones al nuevo mandatario. La Organización de Estados Americanos manifestó su preocupación por la crisis política en Perú, a cinco meses de los comicios.