El Congreso capitalino avaló la Ley de Espacios Culturales Independientes que da cumplimiento a un mandato establecido en la Constitución Política de la Ciudad de México para garantizar el fortalecimiento y desarrollo de sus actividades mediante una regulación que los distingue del común de establecimientos mercantiles, les da acceso a exenciones fiscales y programas de estímulos y los protege de prácticas que los estigmatizan y criminalizan al ser gestionados principalmente por jóvenes.

Aprobada por unanimidad de los 52 legisladores que participaron en la sesión virtual del pleno, la nueva ley garantiza, además, a los llamados ECI, participar en el diseño de la política que establezca el gobierno de la ciudad en la materia y solicitar bienes inmuebles en donación, venta condicionada, permuta, arrendamiento, comodato, fideicomiso u otra figura jurídica, por conducto de las dependencias o entidades competentes.

La presidenta de la Comisión de Derechos Culturales, Gabriela Osorio Hernández, de Morena, y quien elaboró la iniciativa, presentó reservas al dictamen para eliminar un capítulo que permitía a los ECI gestionar ante las alcaldías permisos por evento para la venta ocasional de alimentos y bebidas alcohólicas a fin de evitar caer en contradicción con otras normas y para trasladar a la Secretaría de Administración y Finanzas la facultad de realizar estudios de viabilidad técnica, económica y financiera para poner en comodato inmuebles en desuso del gobierno de la ciudad para los ECI.

Al presentar al pleno el dictamen en sesión virtual, Osorio destacó la resiliencia de los ECI para superar trámites, clausuras y la falta de recursos, así como la estigmatización para poder subsistir como espacios que hacen posible la expresión libre de las diversas actividades culturales frente a las prácticas monopólicas.

La pandemia nos ha enseñado que las artes, las manifestaciones y expresiones culturales son fundamentales para la salud mental y para la construcción de lazos entre las personas a pesar de la distancia. Los espacios culturales independientes son recintos fundamentales para la ciudad y para el ejercicio de los derechos culturales, señaló.