Aplican para el actual programa de restructura
suavesen Buró de Crédito no son manchas negras
Domingo 27 de septiembre de 2020, p. 15
Las medidas anunciadas por el gobierno para que deudores restructuren su deuda con los bancos consideran la imposición de marcas suaves
en el historial crediticio de las personas que opten por los dichos planes.
Según información obtenida en el Buró de Crédito, existen dos tipos de marcas: Cuenta restructurada sin quita por programa institucional o gubernamental y Cuenta restructurada sin pago menor.
El primer caso aplica cuando el crédito debió restructurarse en razón de algún programa de carácter oficial. Al momento de la restructura del financiamiento entre la persona y el banco, el crédito se debió reportar como pago en corriente.
El segundo se hace cuando la cuenta del deudor se restructuró debido a que se modificó la situación del cliente a petición del mismo.
El miércoles pasado, las autoridades del sistema financiero dieron a conocer un nuevo plan de alivio para las personas que han tenido menores ingresos o han perdido su empleo a causa de la pandemia de Covid-19. Se trata de un esquema de restructuras de financiamientos,que permitirán reducir, al menos, 25 por ciento el pago de las mensualidades, aplazar 50 por ciento el plazo de la deuda contratada y reducir la tasa de interés.
Juan Pablo Graf Noriega, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) dio a a conocer que este tipo de medidas dejarán una marca leve dentro del historial crediticio de las personas.
“Es importante que los esfuerzos que se hagan por parte de bancos y deudores para mantenerse al tanto de sus créditos que se vieron restructurados por la pandemia tengan un tratamiento especial en las sociedades de información crediticia.
Todos los créditos que se restructuren en adelante y durante la pandemia, se hayan mantenido puntuales en su pago y sean cartera vigente no tendrán marca en las sociedades de información crediticia. Los créditos que estaban vigentes, pero no al corriente de sus pagos tendrán una marca que no es la tradicional de incumplimiento, sino una más suave derivada de la contingencia de Covid-19
, dijo Graf Noriega.
Añadió que, para los créditos que han sido puestos como cartera vencida derivado de la pandemia, pero que se restructuren, permanecerán en cartera vencida mientras no haya evidencia de pago sostenido, y serán marcados en Buró.
–¿En qué consiste el historial crediticio y el Buró de Crédito?
–El historial crediticio es un registro que se tiene para las personas que cuentan con financiamiento por parte de las instituciones bancarias. Con este tipo de herramientas, se sabe si las personas hacen o no sus pagos en tiempo y forma, y bajo qué conceptos, es decir, si son totales, hacen pagos mínimos o los necesarios para no generar intereses.
La información queda recabada en el Buró de Crédito, pero conforme las personas hagan sus pagos o no quedan diversas marcas registradas, y bajo estas mismas, los bancos o cualquier otra entidad financiera puede decidir en el futuro si entrega nuevos créditos, y en caso de tener un mal historial, si las tasas de préstamo son mayores.
Según información del propio Buró de Crédito, restructurar implica que hay un cambio favorable para el cliente en los términos de su crédito; por ejemplo un cambio en la tasa de interés o en el plazo de la deuda.
Si un cliente está al corriente de sus pagos, restructura y sigue con sus amortizaciones de forma puntual bajo los términos acordados con la institución bancaria, su historial de pagos continuará como un pago puntual. Si el acreditado ya presentaba retrasos de pago, restructura y comienza a pagar adecuadamente, su historial se actualizará para decir que ya está pagando nuevamente lo necesario.
De forma concreta, restructurar un préstamo muestra que los deudores tienen voluntad de pago, pero en el futuro, cada otorgante de crédito tiene sus propias políticas para darlos y que consideran como parte de sus análisis, entre otras cosas, la información contenida en todo el reporte de crédito de las personas.