Viernes 17 de julio de 2020, p. 4
Durante los días de mayor transmisión del coronavirus, en los ochos hospitales federales e institutos nacionales de salud designados como Covid-19 en el valle de México, llegaron a tener 782 personas internadas, de las cuales, 43 por ciento (332) estaban intubadas. Es un número elevado que se explica porque en esos nosocomios se atiende a los enfermos más graves.
Información de la Comisión Coordinadora de los Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad (Ccinshae) señala que como parte de la reconversión hospitalaria para hacer frente a la emergencia sanitaria, se cuenta con más de mil camas distribuidas en los institutos de Enfermedades Respiratorias, Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, Cardiología, Hospital Infantil de México Federico Gómez y los hospitales generales de México, Juárez de México, Manuel Gea González y Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca.
Del total, alrededor de 500 tienen ventilador y, de ser necesario, hay la posibilidad de aumentar 200 a 300 más para pacientes críticos.
Con la infraestructura de estos nosocomios empezó la atención de enfermos en el valle de México, y de acuerdo con el plan de respuesta, seguirán con esta actividad hasta el final de la pandemia.
Hasta ahora, los espacios previstos en los hospitales han cumplido la misión de garantizar el apoyo clínico a quien lo requiera. La estadística de la ocupación de camas indica que la velocidad de transmisión del virus dio inicio en los primeros días de abril, con 114 internamientos. Para la última semana de ese mes, el promedio diario de enfermos en los nosocomios era de 745. Los siguientes días disminuyó a 692, pero alrededor del 10 de mayo, la curva epidémica retomó su curso ascendente y alcanzó el nivel máximo en la semana del 17 al 23 de ese mes, cuando el registro diario de hospitalizados llegó a 782.
En junio, la cifra se mantuvo en un rango de entre 740 a 770. A partir del 17 empezó un descenso lento en el número de personas internadas y así se ha mantenido. El pasado miércoles, el registro era de 618, equivalente a una ocupación de 60 por ciento en promedio.
Los datos corroboran que en el valle de México la pandemia sigue en descenso, aunque la expectativa se mantiene sobre un eventual rebrote, luego de casi tres semanas de que se incrementaron las actividades laborales y económicas. Hoy se dará la actualización del semáforo de riesgo de Covid-19, cuya elaboración toma como referencia cuatro indicadores, uno de ellos es el nivel de ocupación hospitalaria. Los otros son las tendencias de casos de la infección y de las hospitalizaciones, así como el índice de positividad, es decir, el porcentaje de pruebas con resultado positivo al nuevo virus.