En México se han agudizado las agresiones contra mujeres defensoras de derechos humanos. De enero a junio de 2020 se registraron 266 casos, que van desde difamación y detenciones arbitrarias hasta asesinatos, dijo Yésica Sánchez Maya, integrante de Consorcio Oaxaca.

En el foro digital Mujeres defensoras y el derecho a defender, Alejandra Burgos, de la Red de Defensoras de El Salvador, destacó que América Latina se ha colocado como la región más letal en el mundo para ejercer esta actividad. Señaló que en lo que va del año, mientras en Guatemala, Honduras y Costa Rica se ha reportado un asesinato de activistas en cada uno, en México sumaban 17 hasta el 13 de mayo pasado.

Sánchez Maya expuso que con la pandemia de Covid-19 también se ha observado cómo se intensifican las agresiones. No hay día en que no registremos y denunciemos los ataques cibérneticos contra defensoras y periodistas en El Salvador, Honduras o Guatemala. Recordó que en México, Consorcio Oaxaca, organización de la que forma parte, hace un mes fue amenazada por su trabajo.

María de la Luz Estrada, coordinadora del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), coincidió en que la emergencia sanitaria ha impactado en la labor de las organizaciones. En el caso de México, expuso, nos enfrentamos a que muchas autoridades pararon sus acciones de atención a víctimas y cancelaron reuniones presenciales en seguimiento de las alertas de violencia de género que tienen que ver con medidas de seguridad, prevención y de justicia, además de que las fiscalías tienen guardias con poco personal, dejando procesos de investigaciones pendientes.

Bianka Rodríguez, de la organización Comcavis Trans El Salvador, expuso que a raíz de la pandemia, el gobierno del presidente Nayib Armando Bukele Ortez se ha posicionado como autoritario, en el que se han vulnerado muchos derechos con la justificación de proteger la salud.

Indicó que los activistas de las garantías fundamentales han sido criminalizados por Bukele Ortez, quien ha señalado que su labor es de fachada, que estamos del lado del Covid-19, por hacer un señalamiento claro a la vulneración de garantías. Añadió que los primeros días de cuarentena se cometieron detenciones arbitrarias y ejecuciones extrajudiciales de ciudadanos,porque esta pandemia se ha posicionado desde un enfoque de la militarización.