la pasión destruye el racismo
Miércoles 15 de julio de 2020, p. 7
Los Ángeles. Cuando no está controlando máquinas con su mente como una superheroína negra, Ciera Foster se dedica a organizar manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial en las calles de Los Ángeles.
La actriz forma parte de una generación de jóvenes creativos de Hollywood que decidió usar sus talentos adquiridos en la fábrica de los sueños para sensibilizar al público sobre temas acuciantes del mundo real.
Le digo a todo el mundo que todos somos superhéroes, pues los superhéroes son lo mejor de la humanidad
, declara Foster, quien interpreta a uno, Livewire, en la serie web Ninjak vs the Valiant Universe.
Estamos haciendo, respirando historia en este momento
, dice.
Como muchos artistas, Foster volvió a sus raíces activistas –comenzó joven luchando por los derechos estudiantiles y por una reforma judicial– cuando vio el video de la muerte de George Floyd, un hombre negro que murió asfixiado en custodia de un policía blanco.
Como ella, cada vez son más los jóvenes que usan sus talentos para hacer imágenes muy bien producidas
de las manifestaciones, mostrar lo que ocurre y hacerlas virales en las redes sociales.
El mes pasado, tomas aéreas con dron de una marcha pacífica por el bulevar de Hollywood, en la que participaron más de 20 mil personas, se difundieron rápidamente por todo el mundo y se convirtieron en una impronta duradera.
Foster es cofundadora de la Coalición de Liderazgo Negro Aliado (BLAC, por sus siglas en inglés).
"Somos el cambio"
Desde la muerte de Floyd, Tyson Suzuki, un joven negro de Hawái que es editor cinematográfico, ha encabezado protestas diarias contra el racismo frente al ayuntamiento de Los Ángeles.
“Empezamos a protestar, pero lo hacemos en armonía: ‘(alcalde) Eric Garcetti, escucha. Garcetti, escucha. Somos el cambio.’”
Su grupo Active Advocate busca alcanzar 100 días continuos de inconformidad, aunque el activismo de este líder treintañero se remonta muchos años atrás.
Suzuki empezó cuando era adolescente. No soy un activista de la noche a la mañana, soy un organizador
, dice, señalando que muchos de los que lo apoyan también trabajan en el mundo del espectáculo y aplican a estos fines sociales la misma pasión que destinan a sus trabajos creativos.
En este momento, la pasión está destruyendo el racismo
, agrega.
Para el cineasta AJ Lovelace, de 28 años, eso significa hacer películas y obras de teatro socialmente conscientes
, así como usar la tecnología y las redes para ayudar a los manifestantes a encontrar el grupo específico con el que se alinean más
.
Jasmyne Cannick, defensora de la justicia social, explica que no es una sorpresa que los jóvenes en la industria del entretenimiento estén protestando
, dado el racismo que existe en el sector.
“Todo el mundo que ‘ama a la gente negra’ en Hollywood no ha hecho un buen trabajo porque se ha permitido que (el racismo) continúe todo este tiempo”, indica la experta, de 42 años.
Para Paris Draper, cantante y activista, de 20 años, el enfoque de su generación en la empatía y la amabilidad ofrece la esperanza de un cambio radical.
Nos diferenciamos de las generaciones pasadas porque nos tomamos el tiempo para escucharnos unos a otros
, resalta.