Mayo: podría registrarse una mejoría en el mercado petrolero // Slim pierde casi una tercera parte de su fortuna
Con FCH, EU hacía lo que quería // Interlocuciones, a discreción // Felipe, el disipado // Amnesia sobre García Luna
Multifamiliar Miguel Alemán, monumento humano// Polis, así los queremos // Hasta siempre, camarada Óscar Chávez
Robo incontenible
Postneoliberalismo. Una Nación, tres economías (2/2)
Barones placean a funcionarios // No todos jalan parejo en la 4T
Leones
n una escandalosa muestra de irresponsabilidad, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, desafió ayer en un mitin de seguidores suyos las medidas de confinamiento establecidas por los mandatarios estatales de ese país para mitigar los contagios de SARS-CoV-2, en momentos en que el ritmo de infecciones se acelera, la cifra de fallecidos al día ha superado 400 y la pandemia aún no ha llegado a su punto máximo entre la población brasileña, según estimaciones de los expertos.
Urge la entrega del reparto de utilidades
i mamá es vendedora en uno de los restaurantes de la empresa Alsea, yo soy estudiante de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México y hemos visto afectada severamente nuestra economía debido a que por la crisis sanitaria causada por el Covid-19, la empresa mandó a descansar a todos sus trabajadores sin goce de sueldo.
n 2008, una crisis económica puso de rodillas a Estados Unidos y, por extensión, al mundo entero. En 2020 se sufre otra crisis global cuyas dimensiones pueden ser mayores y más profundas.
ircula una amplia variedad de teorías que sostienen la muerte inminente del sistema neoliberal mundial a raíz de la pandemia de Covid-19. Se postula que a partir de la crisis actual los gobiernos y los pueblos se darán cuenta de la necesidad tanto de establecer una mejor relación, más sana y equilibrada, con la naturaleza como de ampliar la inversión pública en sistemas de salud y otros servicios públicos.
uando irrumpió el Covid-19, hacía ya un tiempo que el mundo estaba sumergido en la posverdad y las noticias falsas ( fake news). La desinformación (la contaminación de la información con contenidos falsos que aparecen como verdaderos
y son fabricados para manipular las emociones e impactar en la opinión pública
de manera intencional, deliberada y planificada) no es, tampoco, un invento de Donald Trump y la banda de gánsters sociópatas (Noam Chomsky dixit) que le rodea en la Casa Blanca. Lo que ocurrió, con Trump, en plena era digital, fue una proliferación de noticias tóxicas, xenófobas y supremacistas, con sus discursos de odio, bots e hipótesis conspiracionistas, desplegada por la maquinaria mediática de su administración con fines electorales.
ace un mes el presidente Donald Trump anunció un gran operativo para impedir el ingreso a Estados Unidos de drogas ilegales procedentes de Venezuela, México, Colombia y el Triángulo Norte. Dijo que su gobierno no permitirá que los cárteles exploten la pandemia del coronavirus para amenazar la vida de los estadunidenses
. Para ello, en cooperación con 22 naciones asociadas, el Comando Sur de las fuerzas armadas estadunidenses aumentará la vigilancia, la intercepción y la incautación de los envíos de drogas y brindará apoyo adicional para los esfuerzos de erradicación que se llevan a cabo en varios países. En el operativo intervienen destructores de la Armada, barcos de combate, aviones y helicópteros y patrullas de la guardia costera.
esde antes de que irrumpiera la pandemia del coronavirus se habían planteado algunas ideas sobre el proceso general del crecimiento económico y sus consecuencias.
ludir al surrealismo poético ahora puede no ser un ejercicio de nostalgia sino un itinerario inagotable para el viaje al porvenir en crisis, incierto, peligroso, que espera al mundo después de la pandemia en curso. Algo que se antoja más que mera coyuntura ha cambiado el cristal con el que miramos las cosas. Hasta hace unos meses, cuando la revista Blanco Móvil presentaba un número doble (145-146): Poesía: 100 años de surrealismo
, nuestra óptica daba por sentado que el movimiento que dispararon Breton, Aragon, Eluard, Jacob y toda aquella punta de aventados, la vanguardia definitiva para bien y para mal del arte, era hija de la guerra y las primeras revoluciones del siglo XX, incluyendo la sicoanalítica y la soviética. Pero no quedaba tan claro que también era hija de la pandemia.