Para instalar sucursales del Banco del Bienestar en las regiones más distantes y de alta marginación en el país –para la dispersión de los fondos de los programas sociales– dependencias federales ponen a disposición de la institución bancaria inmuebles sin uso, además de que gobiernos locales, ejidos y comunidades donarán terrenos.

Hace unos días, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que hay retraso en las obras –a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional– por los predios, pues apenas se tienen disponibles 300, de mil 350 sucursales proyectadas para este año. En total se pretende construir 2 mil 700 en dos años.

En la búsqueda de los terrenos están involucrados delegados federales y regionales para convencer a las comunidades de que donen, a fin de iniciar los trámites correspondientes, explicó su coordinador nacional, Gabriel García.

En Veracruz, por ejemplo, el delegado Manuel Huerta ha dicho que contaban con 200 propuestas de predios –tanto federales como de gobiernos estatales y municipales– para instalar alrededor de 130 sucursales, que son verificados por el Ejército para iniciar las obras.

Rabindranath Salazar, titular del Banco del Bienestar, expresó que los primeros terrenos provendrán de dependencias federales (como la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, IMSS e Issste) que cuentan con infraestructura sin uso, tras verificar que su ubicación concuerde con los lugares donde exista número de beneficiarios importantes.

Explicó que para tener acceso a los que donen gobernadores y ayuntamientos se requiere autorización de congresos locales y cabildos, respectivamente, y estamos pasando a las autoridades el procedimiento definido, de conformidad con la ley. Lo mismo a ejidos y comunidades, particularmente de Chiapas y Oaxaca, para que realicen asambleas y se acepte el traspaso de terrenos.

No se está expropiando nada, y esperamos que al 10 de marzo podamos hablar de mínimo 300 que han sido donados, expresó.

Los delegados federales, además de estar involucrados en la búsqueda de los terrenos para el Banco del Bienestar, coordinan a Servidores de la Nación para que visiten comunidades, actualicen padrones de bienestar, verifiquen la constitución de los comités escolares de administración del programa La Escuela es Nuestra, entre otros servicios para beneficiarios de programas.