Guadalajara, Jal., La Secretaría de Salud federal dio a conocer este jueves el Panorama epidemiológico del dengue, en el que destaca que en las seis semanas recientes Jalisco tuvo un repunte de casos comprobados y se detectaron 744 nuevos enfermos confirmados. Esto consolidó a la entidad como la de mayor número de contagiados, con 9 mil 600 personas, 40 por ciento de los 23 mil 736 enfermos del país.

Jalisco también concentra el mayor numero de casos más graves, con mil 164, o 42 por ciento de los 2 mil 756 registrados en el país, y de dengue con signos de alarma, con mil 960 casos o 24 por ciento de los 8 mil 30 contabilizados en México. Otro renglón que creció fue el de las defunciones atribuibles al dengue: hasta la semana pasada eran 102 personas y ahora suman 10 más.

Del mismo modo, el estado sigue a la cabeza en defunciones, con 24, y en incidencia, con 115.92 casos por cada 100 mil habitantes, aunque hay municipios con tasas más altas, entre ellas Teocuitatlán de Corona (mil 169.29) y Juchitlán (719.32), ambos en zona de epidemia, o Zapotitlán de Vadillo (559.93) y Tonaya (516.57), en zona de alarma epidemiológica.

Estos datos contradicen al secretario de Salud estatal, Fernando Petersen, quien el primero de noviembre advirtió que con la llegada del frío y la disminución de las lluvias los casos de dengue iban a bajar.

El 15 de noviembre, durante su comparecencia ante el Congreso local con motivo de la glosa del informe del gobernador Enrique Alfaro, Petersen fue increpado por diputados de los partidos Acción Nacional, del Trabajo y de Morena, quienes lo acusaron de omiso para evitar la epidemia y le exigieron que se decrete alerta epidemiológica en el estado.

También le reprocharon que el número de brigadistas en las campañas de prevención y fumigación no es suficiente para cubrir el estado, pero sobre todo los legisladores hicieron hincapié en la negligencia de usar insecticida caduco durante los primeros meses del año en las campañas preventivas.

El funcionario, cuya destitución exigieron diputados de Morena, justificó el uso del fumigante caducado en 2015 amparado en la garantía que les dio el fabricante, Bayer, de que el químico aún servía y no dañaba la salud humana, aunque evitó mostrar el documento por “una estrategia de comunicación.

Aquí tengo ya la carta de Bayer de México, en la cual nos hacen constar que no son fumigantes que estuvieran caducos; se habían adquirido en administraciones anteriores, estaban ahí y tienen vigencia hasta junio de 2020, dijo.

En su primer informe de gobierno, ofrecido apenas el 6 de noviembre, el gobernador Enrique Alfaro dijo que durante el año se han invertido 116 millones de pesos en el combate al dengue, que se actuó a tiempo y que buena parte de la propagación de la enfermedad se debía al cambio climático.