Las dos principales fuentes de financiamiento utilizadas por las empresas en México son los proveedores y la banca comercial, según revela la Encuesta trimestral de evaluación coyuntural del mercado crediticio.

De acuerdo con el sondeo del Banco de México correspondiente a julio-septiembre, 77.6 por ciento de las empresas señaló que utilizó financiamiento de proveedores, 32.6 usó crédito de la banca comercial, 17.9 señaló haber utilizado financiamiento de otras empresas del grupo corporativo o la oficina matriz.

Otro 4.4 por ciento de las empresas encuestadas indicó que utilizó financiamiento de la banca de desarrollo, 6.4 por ciento de la banca domiciliada en el extranjero y 1.6 por ciento por emisión de deuda en el mercado accionario bursátil (la suma de los porcentajes es superior a 100 ya que las empresas pueden elegir más de una opción).

El conjunto de empresas que utilizó nuevos créditos bancarios expresó haber enfrentado condiciones más favorables a las del trimestre previo en términos de los plazos ofrecidos y las tasas de interés, pero los montos y las condiciones para refinanciar créditos fueron similares.

En cuanto a las comisiones y otros gastos, los requerimientos de colateral y los tiempos de resolución del crédito, las empresas percibieron condiciones menos favorables respecto del segundo trimestre de 2019.

Se observó una disminución tanto en la proporción de empresas del país que utilizó financiamiento de proveedores (de 78.5 por ciento en el trimestre previo a 77.6 por ciento), como en aquella que señaló haber usado crédito de la banca comercial (de 35.5 en el trimestre previo a 32.6 por ciento en el trimestre julio-septiembre de 2019).

Las limitantes para solicitar un crédito señaladas por las empresas, en orden de importancia, fueron: la situación económica general (52.0 por ciento), las tasas de interés del mercado de crédito (48.2), los montos exigidos como colateral (46.3), las ventas y rentabilidad de la empresa (42.6), las condiciones de acceso al crédito bancario (42.4), el acceso a apoyo público (38.5), la disposición de los bancos a otorgar crédito (35.3), la capitalización de la empresa (35.2), las dificultades para pagar el servicio de la deuda vigente (32.7) y la historia crediticia de la empresa (27.4 por ciento).