A pesar que desde este ciclo escolar 2019-2020 se promovió en las escuelas la conmemoración de las fechas históricas como factor de con-vivencia familiar, alumnos de prescolar, primaria y secundaria acudieron a un día regular de clases, donde fueron pocos los planteles que optaron por realizar algún acto conmemorativo del 109 aniversario de la Revolución Mexicana.

Profesores y directores de educación básica destacaron que la aplicación de los fines de semana largos, que en este caso coincidió con el llamado El Buen Fin, facilitan que fechas como el 20 de noviembre acaben por ser absorbidas por el consumismo y pierdan todo su sentido cívico y formativo.

Francisco Bravo, director de educación primaria, con más de 30años de experiencia docente, destacó que fueron muy pocos los niños que acudieron hoy a las escuelas para realizar actividades conmemorativas. En nuestro caso optamos por una obra de teatro, canciones y efemérides, y en cada grupo se abordó el tema de la Revolución Mexicana, aunque no esté en los planes y programas de estudio, pues es un tema de historia que sólo se aborda en el quinto grado.

Como si fuera cualquier día

En algunas primarias de la capital del país, destacaron docentes frente a grupo, se convocó a padres de familia a festivales alusivos a la gesta revolucionaria, pero fueron pocos los que asistieron, pues la mayoría debía presentarse a sus trabajos. Es triste que el 20 de noviembre quede reducido a una fecha como cualquier otra, porque la aplicación de los fines de semana largos, en fechas del calendario cívico nacional, se usan para ir de comprar o a salir fuera de la ciudad.

Bravo recordó que la conmemoración del 20 de noviembre estaba considerada en las escuelas como una fecha central, tan importante como la celebración de la Independencia o el Día de las Madres. Era un día multicolor en que los alumnos se dedicaban a recordar esta gesta heroica y a quienes participaron en ella. Era importante formar a los niños para que reconocieran la importancia de este movimiento revolucionario, incluso en la actualidad, pero todo se ha ido diluyendo a favor del consumo.