Un total de 5 millones de personas se hospedaron en México durante 2018 a través de los servicios de Airbnb, de las cuales poco más de 3 millones son residentes del país.

La plataforma de hospedaje temporal dijo a La Jornada que el crecimiento en la demanda de turistas mexicanos para viajar al interior del país aumentó 132 por ciento entre 2017 y 2018. El impacto económico de este sistema de hospedaje ascendió a 2 mil 700 millones de dólares.

Airbnb no sólo es popular en el extranjero, sino también con los viajeros mexicanos que buscan opciones únicas que les permitan conocer de manera auténtica su país, guiados a través de los consejos de los anfitriones locales de cada lugar donde se hospedan, señaló Airbnb.

Detalló que el costo promedio de las residencias alquiladas fue de mil 500 pesos por noche. Los principales usuarios de la plataforma residen en la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, pero ahora se han sumado los de Querétaro y Puebla.

Airbnb ha contribuido a que también más mexicanos viajen dentro del país de manera accesible. El turismo doméstico es una forma de conocer nuestro país y de cómo los mexicanos podemos ayudarnos mutuamente, dijo Carlos Olivos, director de comunicación de Airbnb para la América de habla hispana.

El directivo agregó que la plataforma ofrece hospedaje desde un cuarto privado, una cabaña en Pátzcuaro, Michoacán, hasta una carreta en Jalisco. Son oportunidades para todos y mantiene la diversidad y accesibilidad en la oferta, que es esencial para que más mexicanos se atrevan a probarlo y a contribuir al turismo local , señaló Olivos.

La plataforma señala que contribuye con el pago del impuesto de hospedaje en 8 entidades, gravamen que suele utilizarse para campañas de promoción turística.

Caída en hotelería

En contraparte, los hoteles de 70 destinos turísticos monitoreados por la Secretaría de Turismo revelaron caída de 1.1 por ciento en la tasa de habitaciones ocupadas de enero a agosto pasado. Al cierre de éste, la tasa de ocupación fue de 61.6 por ciento, mientras en igual lapso de 2018 fue de 62.7 por ciento, señaló DataTur, sistema de estadísticas de la dependencia. Los hoteles en los centros de playa mostraron baja de 1.6 por ciento en ocupación y en las ciudades cayó 0.6, agregó DataTur.

Los reportes señalan desaceleración en el promedio de cuartos ocupados en ese lapso. Entre enero y agosto la hotelería en esos destinos seleccionados registró un promedio de 251 mil 14 habitaciones ocupadas, un avance de sólo 0.04 por ciento respecto a igual periodo de 2018, cuando la cifra fue de 250 mil 916. La tasa de crecimiento fue de 3.4 por ciento para el periodo de enero a agosto de 2018 frente a 2017.