Kimberly Clark de México dio marcha atrás ayer a posponer sus inversiones en México, decisión adoptada por la compañía en reacción a las políticas del gobierno actual, luego de que en redes sociales se extendió un llamado a boicotear sus productos.

La empresa, presidida por Claudio X. González Laporte –crítico del hoy presidente Andrés Manuel López Obrador–, sostuvo que este año realizará inversiones por 3 mil millones de pesos, contrario a lo que se publica en algunas notas periodísticas.

El lunes pasado, durante una conferencia con analistas para presentar los resultados al tercer trimestre del año, Pablo González Guajardo, director general de la compañía, dijo que, desgraciadamente, las políticas del gobierno federal no son las que les gustarían para invertir en el corto plazo.

Pero la empresa comentó ayer en un nuevo posicionamiento que el año próximo prevé superar la inversión efectuada en éste y se excusó por los comentarios sobre la política del gobierno al decir que se refería al contexto nacional e internacional, en el que se observa un menor ritmo de crecimiento, por lo que se requiere mejorar las condiciones para atraer más inversión en el corto plazo.

Ayer, en redes sociales, se volvió tendencia un llamado a boicotear a Kimberly Clark, empresa que produce y comercializa productos de consumo para higiene personal y familiar.

En diversos mensajes, usuarios de Twitter y Facebook publicaron imágenes en las que aparecen los productos que fabrica la compañía, la cual cotiza en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), pero también utilizaron etiquetas, como #BoicotAKimberlyClark, #NoMasBerrinchesNiChantajes y #NoAmenacesClaudio, para hacer el llamado.

Kimberly Clark se pasó de la raya. ¿Quiénes creen que son para amenazarnos? Nos limpiaremos el pandero con Charmín si es necesario. No necesitamos de sus productos #BoicotKimberlyClark, tuiteó @mariafdezv.

#ClaudioNoAmenaces. Kimberly Clark no tiene planeado invertir en México. Mexicanos podrán dejar de consumir sus productos, escribió la usuaria @pilaresmetepec.

Los internautas también hicieron referencia al hijo de González Laporte, el empresario Claudio X. González Guajardo, quien ha sido crítico del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

México es un país que está lleno de oportunidades y no hay empresa que quiera crecer que no estimule sus posibilidades de nueva inversión, consideró ayer Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), al referirse al anuncio de Kimberly Clark.

No estaba enterado de esa decisión. Creo que las determinaciones de cualquier empresa privada son reservadas y cada quien tiene la forma de enjuiciar sus posibilidades, expresó Salazar Lomelín momentos antes de participar en el foro México Cumbre de Negocios, que concluyó ayer en Cancún, Quintana Roo.

Gustavo de Hoyos Walter, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana, aseveró que esa organización empresarial respalda la posición de la empresa, en la que buscó revirar lo dicho por el director general.

Durante las elecciones presidenciales de 2018 González Laporte fue señalado, junto con otros empresarios del Consejo Mexicano de Negocios, de pactar el triunfo del candidato priísta, José Antonio Meade. Sin embargo, tanto el industrial como el resto del sector privado limaron asperezas el 4 de julio de 2018 con el mandatario y en mayo pasado anunciaron inversiones por 32 mil millones de dólares.

González Laporte ha declarado en meses recientes que sigue apoyando al gobierno federal, pero si bien no ve crecimiento para este año, considera que para los siguientes años sí habrá, pues éste es de aprendizaje.

Durante la sesión bursátil de ayer, las acciones de Kimberly Clark se mantuvieron con altibajos. Después de alcanzar un máximo de 39.2 pesos por título, bajaron a 38.8 y concluyeron con una ganancia marginal de 0.02 por ciento.

Sólo en el tercer trimestre del año la firma reportó un crecimiento en sus utilidades netas de 35 por ciento, para alcanzar mil 235 millones 556 mil pesos y un acumulado en los tres trimestres de 2019 de 3 mil 699 millones 682 mil, de acuerdo con los informes de la BMV.

Cabe recordar que durante las administraciones de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto se perdonaron impuestos a la empresa por 44 millones 415 mil pesos.