Martes 22 de octubre de 2019, p. 3
Madrid. La edad del padre, a diferencia de la madre, no produce aumento de embriones cromosómicamente anormales, reveló un estudio llevado a cabo por Igenomix, publicado en el Journal of Assisted Reproduction and Genetics.
La investigación, la más grande hasta la fecha en su área, confirma que la edad del padre no afecta la salud cromosómica de la descendencia, a diferencia de la edad de la madre, que cuanto más avanzada es, más aneuploidías presentan sus embriones.
Cada vez son más los estudios científicos que abordan el impacto de la edad de los progenitores en la salud de su descendencia, pues se está ante un paradigma social sin precedente en el que la paternidad se está demorando.
Hasta la fecha, algunos estudios habían sugerido que la edad avanzada tiene consecuencias negativas para la función testicular, muerte fetal, anomalías congénitas, trastorno de espectro autista o esquizofrenia. Las mutaciones son el monogénicas, el modo de herencia de la enfermedad más estrechamente vinculada a la edad paterna avanzada.
Varones, responsables de otros síndromes
Teniendo en cuenta la certeza de que la edad materna avanzada es la responsable de numerosas aneuplodías en los embriones, dando lugar a abortos durante el primer trimestre de embarazo o a una descendencia con problemas cromosómicos, los investigadores de Igenomix han puesto el foco en el varón, por ser el responsable generalmente de cerca de 55 por ciento de las aneuploidías cromosómicas sexuales, incluso 80 por ciento del síndrome de Turner y 50 por ciento del de Klinefelter.
Para determinar la responsabilidad de la edad paterna en la salud cromosómica del embrión se estudiaron 6 mil 934 embriones, todos de óvulos de donante (menor de 35 años y con fertilidad probada) y semen de hombres entre 18 y más de 60 años, de más de 150 clínicas de España, Estados Unidos, Canadá, Brasil, India y Émiratos Árabes, entre 2016 y 2018.