Greenpeace México urgió a los legisladores a aprobar lo antes posible las reformas a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos para limitar la generación de plásticos de un solo uso.

Llamamos a los legisladores a dejar de dilatar la discusión sobre la reformas a la ley general de residuos para que se incluyan limitantes a la contaminación por plástico. Esto tiene que garantizar un cambio de fondo, que contemple la responsabilidad extendida al productor, y eso no quita la responsabilidad de nosotros como ciudadanos consumidores, sino que pone énfasis en quien pone un producto en el mercado, el cual debe asegurar su retornanabilidad, su canje, su cadena de valor para ser reciclado y se integre a los ciclos de la naturaleza, para que no perjudique al medio ambiente, expuso Miguel Rivas Soto, coordinador de la Campaña de Océanos de Greenpeace México.

Entrevistado con motivo de la presentación en el Huerto Roma Verde, de la Guía de Consumo Responsable, elaborada por la agrupación, actividad en la que participó la actriz Gabriela de la Garza, detalló que 13 millones de toneladas de plástico van a dar a los océanos cada año, esto es un camión de basura lleno de plástico que se vierte cada minuto a nuestros océanos.

Precisó que en la actualidad existen 11 iniciativas de ley sobre residuos sólidos en el Senado y 17 en la Cámara de Diputados y advirtió que quedan pocas semanas de la actual legislatura. A ver si de verdad hay un compromiso por parte de los legisladores. Ya hubo mesas de discusión a principios de año, ya no es necesario dilatar más, ahora es necesario actuar y modificar la ley en favor de los ciudadanos.

Insistió en que aunque es positivo disminuir el uso de bolsas de plástico y de popotes, no es suficiente; hay que tener un cambio sistémico de fondo, un modelo diferente de consumo, pues explicó que aunque la ciudadanía quiera disminuir la utilización de plásticos de un solo uso, no hay opciones en la oferta de productos, ya que la mayoría viene en empaques de plásticos que una vez usados son desechados, y la minoría de ellos podrán ser reciclados. Por eso, remarcó, hay que producir menos basura contaminate de océanos y de la biodiversidad.

En la Guía, se promueve a “70 negocios en el país, inspirados en el movimiento cero waste, que promueve que la gente compre sin envases, o que pueda rellenar, retornar y canjearlos. Que no te tengas que llevar envases que pronto acabaran en la basura”.

La idea es cambiar el modelo desde la raíz, desde cómo se generan los productos, y la invitación es a que descarguen la Guía desde la página web de Greenpeace y que también privilegien a los negocios que hacen las cosas diferentes.