Domingo 20 de octubre de 2019, p. 29
Aunque la osteoporosis y la osteoartritis son enfermedades mayormente relacionadas con el envejecimiento, dichas condiciones pueden generarse a partir de edades más tempranas por factores de riesgo como el sobrepeso y la obesidad, el sedentarismo y el consumo de tabaco, señaló Rolando Espinosa, presidente de la Asociación Mexicana de Metabolismo Óseo y Mineral.
Durante una jornada informativa sobre el tema, realizada ayer con motivo del Día Mundial de la Osteoporosis –que se conmemora el 20 de octubre–, el especialista subrayó que ambos padecimientos son muy comunes a partir de los 50 años de edad, cuando las personas comienzan a perder densidad en los huesos.
Después de los 50 años, se calcula que en el mundo y en México la mitad de la población adulta va a tener baja masa ósea u ostopenia. De ellos, 20 por ciento desarrollará osteoporosis y al menos 35 por ciento va a sufrir al menos una fractura
por la fragilidad en los huesos que genera dicho mal, indicó Espinosa.
Por lo que se refiere a la osteoartritis, enfermedad que reduce seriamente el cartílago que rodea a las articulaciones como una especie de cojín protector, se calcula que 12 por ciento de la población total del país sufre de esta condición, en la cual sí hay síntomas previos –a diferencia de la osteoporosis–, como dolor y pérdida de movilidad.
Lo anterior hace que ambas dolencias figuren entre las más recurrentes en el país, lo que genera discapacidad en los pacientes por lesiones en diversas partes del cuerpo, así como pérdidas económicas considerables para las familias.
De hecho, según estudios especializados, tan sólo la osteoporosis podría provocar una carga económica mundial de alrededor de 132 mil millones de dólares para 2050.
Aunque los dos padecimientos se desarrollan con más frecuencia a partir de los 50 años, particularmente en las mujeres, no están asociados únicamente a la edad, sino también a los hábitos poco saludables de los pacientes, como tener mala alimentación, no realizar ninguna actividad física e incluso al tabaquismo, indicó Espinosa.
Por lo anterior, el especialista en enfermedades del sistema músculo-esquelético señaló que para prevenir estas enfermedades es recomendable hacer ejercicio con regularidad, no desarrollar sobrepeso, tener una ingesta suficiente de calcio y vitamina D y exponerse al sol unos 10 minutos por varios días de la semana, para que este último compuesto se metabolice.
De igual manera, Espinosa recalcó la importancia de no creer en remedios milagrosos
porque, al tomarlos y confiar en que le van a servir, los pacientes se quedan sin recibir un tratamiento médico realmente útil.