Nueva York. Greta Thunberg se sumó a cientos de jóvenes en la huelga climática semanal frente a la sede de la Organización de Naciones Unidas en esta ciudad, parte del movimiento de Los viernes por el futuro que ella inspiró alrededor del mundo hace un año.

Thunberg, invitada para participar en una cumbre sobre cambio climático por la ONU el 23 de septiembre –donde hablará– que se realizará como parte de las actividades anuales de la Asamblea General, participó con los jóvenes en su protesta exigiendo acción inmediata para frenar el cambio climático y rescatar el futuro de ésta y las próximas generaciones.

La sueca de 16 años acompañó a dos compañeras neoyorquinas, Alejandra Villaseñor (de 14 años) y la mexicana Xiye Bastida (17 años), quienes han impulsado este movimiento aquí desde finales del año pasado, en una breve marcha de varios cientos y un mitin con mini discursos. Villaseñor denunció que nuestros líderes deberían haber optado por nuestro futuro en lugar del dinero e insistió en que este movimiento era para rescatar el futuro de todos.

Mientras continuaba la concentración, las tres jóvenes cruzaron la Primera Avenida para ingresar al edificio del secretariado de la ONU al aceptar una invitación para reunirse con la presidenta de la Asamblea General, María Fernanda Espinosa. Thunberg le expresó a Espinosa: espero que esta cumbre sea un tipo de parteaguas, donde la gente empiece a entender lo que en verdad está ocurriendo y afirmó que este movimiento continuará aplicando presión sobre los gobiernos del mundo que se reúnan aquí.

Después de cada intervención hubo canto de consignas, entre ellas, no se queden viendo, súmense, nos vamos de huelga por la vida y todo los que amamos, vamos a la huelga para ustedes; ¿ustedes lo harán por nosotros?, y dejen el carbón y el petróleo en la tierra. Llevaban pancartas como si ustedes no actúan como adultos, los niños tendremos que hacerlo, cambio de sistema no cambio climático y Mi casa se está incendiando.

Esto siendo Nueva York, buena parte de los jóvenes activistas son migrantes o hijos e hijas, o nietos y nietas de migrantes, entre ellos de origen mexicano, hindú, ucraniano, japonés, chileno y caribeños entre otros. Casi todo movimiento local en esta ciudad suele ser global por el mosaico de participantes, tal como se expresó aquí ayer.

La activista sueca llegó a Nueva York el miércoles en un velero especialmente equipado para no dejar ninguna huella de carbón en el medio ambiente en el tránsito del Atlántico desde Inglaterra, viaje que tardó 15 días.

Thunberg, la figura más reconocida a escala mundial en el movimiento para enfrentar la emergencia ambiental que ha puesto el futuro del planeta en jaque, encabezará una huelga global sobre el cambio climático el próximo 20 de septiembre en esta ciudad, hablará ante los representantes de los 193 países miembros de la ONU en la cumbre climática el 23 de septiembre, y ha anunciado que viajará por las Américas –incluyendo México– rumbo a la cumbre climática de la ONU programada para diciembre en Chile.

Ayer, como todos los viernes, jóvenes en decenas de ciudades alrededor del mundo –desde Alemania a Pakistán, Uganda a Polonia entre otros– realizaron sus huelgas climáticas, en algunos lugares sólo con decenas, en otros decenas de miles [https://www.fridaysforfuture.org. Otras organizaciones y coaliciones están colaborando para la huelga climática global del 20 de septiembre [https://strikewithus.org].

No queremos que ustedes nos aplaudan o que nos digan que vamos a salvar al mundo. Queremos que ustedes se vayan a la huelga con nosotros en septiembre, tuiteó Holly Gillibrand, activista de 14 años, en un eco del mensaje que Greta y sus compañeras repitieron aquí y en decenas de otras partes del mundo.