El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, advirtió ayer: no vamos a retirar a la Guardia Nacional (GN) del control migratorio, porque eso está en la Constitución, y ésta es la que nos rige. Además, subrayó, no hay motivo para ello.

En entrevista, al concluir su participación en la reunión plenaria de los senadores de Morena –que se realizó en la vieja casona de Xicoténcatl–, al canciller se le cuestionó sobre la petición de la Organización de las Naciones Unidas, de retirar a la Guardia Nacional del control migratorio, no es la ONU quien lo pidió sino el Comité Contra la Discriminación Racial de la ONU.

El Instituto Nacional de Migración dijo, el que hace las funciones de regulación y la Guardia Nacional ha actuado, yo diría de manera muy respetuosa de la ley, muy clara, no tengo conocimiento de incidentes que lamentar en contra de derechos humanos de manera grave, por parte de esta corporación policiaca.

Esto lo sé, porque yo mismo le hablé al presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para preguntarle. Entonces la política mexicana se sustenta en la Ley de Migración, que nunca ha dejado de estar en vigor, que señala que nadie puede entrar al país, si no se registra. Entonces, no hay ningún cambio en la política migratoria de México.

Destacó que “esa corporación ha actuado con suma responsabilidad y eficacia y lo único que está haciendo es que se cumpla la ley mexicana. Y en ello no han violado los derechos humanos de las personas.

En ese contexto, dijo más bien debemos felicitarnos que lo está haciendo tan bien y que lo esté haciendo sin ninguna de las cosas que muchas organizaciones anticipaban que iban a ocurrir. Eso no ocurrió.

Ebrard explicó que les han señalado tres casos, “uno porque se acercó (la Guardia Nacional) a una casa de migrantes; otra, por algo similar, y una más porque estaba entrando en Tapachula, en la Estación Migratoria Siglo XXI. Lo que ha hecho esta corporación es guardar el orden y ya, y no hay ninguna referencia de violaciones a derechos humanos.