Jueves 30 de mayo de 2019, p. 5
Villahermosa, Tab., El titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Santiago Nieto Castillo, señaló que en México no hay intocables, por muy grandes o muy fuertes que pudieran parecer. Al final, sostuvo, todo se termina por asentar en el ámbito de la justicia y del estado constitucional del derecho.
Apuntó que la instrucción presidencial recibida es de cero tolerancia a la corrupción y a la impunidad, de ahí el mensaje de que no hay intocables.
Tras la firma de un convenio de colaboración entre la SHCP y la Unidad de Inteligencia Patrimonial y Económica del estado, comentó que ya son 27 las entidades que cuentan con estas instituciones, pues al inicio del gobierno sólo había 10.
En este sentido, refirió que el Grupo de Acción Financiera Internacional ha sido uno de los espacios de mayor discusión en torno a la problemática de lavado de dinero, financiamiento al terrorismo, proliferación de armas de destrucción masiva y en general cualquiera de los delitos de los temas relacionados con lavado de dinero.
En su informe de evaluación sobre México presentado en enero de 2018 y hecho público, dijo, hay en este momento un proceso de revisión de recomendaciones.
En el informe se indica que México cuenta con un sistema financiero sólido y un espacio de integración con normas jurídicas que si bien son perfectibles, funcionan de manera adecuada para detectar las problemáticas relacionadas con el lavado de dinero.
Ante el gobernador Adán Augusto López Hernández, funcionarios estatales, alcaldes, empresarios y notarios, Nieto Castillo mencionó la necesidad de actualizar la evaluación nacional de riesgo, cuya última edición data de 2016.
Por ello, en este momento la administración trabaja de manera coordinada con espacios en la administración pública federal, los sectores privado y las entidades federativas para tener una evaluación que permita detectar cuáles son los problemas vinculados con el riesgo de lavado dinero del país.
Esto incluye la corrupción, el robo de hidrocarburos y los temas relacionados con la defraudación y la evasión fiscal, particularmente outsourcing, facturación y empresas fachada, subrayó.
Refirió que México desafortunadamente sigue sin contar con un número suficientemente alto de sentencias condenatorias en materia de lavado de dinero. Asimismo, de una muy reducida capacidad de decomiso y de extinción de dominio de los bienes por actos de corrupción y por tanto es necesario cambiar las estrategias que hasta este momento se han tenido.