En 2017 hubo 14 mil 596 solicitudes de asilo a México. La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) aún tiene pendiente por resolver poco más de la mitad, 7 mil 719, lo que evidencia las dificultades para que miles de personas puedan acceder e esa condición.

Integrantes del Grupo Articulador México (GAM) informaron en conferencia, en la que se presentó el Plan de acción de Brasil 2014-2017 (una hoja de ruta en común a escala regional para fortalecer la protección y promover soluciones sostenibles para personas refugiadas, en la que se presenta un balance de la situación en México), que el año pasado la Comar reconoció sólo a mil 907 personas con la condición de refugiadas y 918 recibieron protección complementaria, menos de 20 por ciento de los solicitantes ese año.

Las peticiones de asilo han crecido de manera poco proporcional: en 2014 se presentaron 2 mil 137 solicitudes, en tanto que el año pasado se rebasaron las 14 mil. A pesar de eso, lamentaron las organizaciones que forman parte del GAM, no ha crecido al mismo ritmo la capacidad del Estado para recibir, procesar y brindar protección internacional a las personas que lo necesitan.

Gabriel Godoy, de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados, señaló que por un lado el Estado mexicano impulsa acuerdos globales en favor de los migrantes, como la Convención sobre el Derecho de las Personas Migrantes y sus Familias, pero por el otro cierra las puertas a miles: sólo tiene 0.048 refugiados por cada mil habitantes, mientras naciones como Líbano o Uganda tienen 173 y 24, respectivamente.

Mientras el número de solicitudes de refugio a México crece, aumentan las detenciones, rechazos y deportaciones en los aeropuertos nacionales a personas en tránsito. Las cifras del Instituto Nacional de Migración (INM) indican que en 2016 se registraron 180 mil detenciones, 160 mil devoluciones y a más de 14 mil personas se les impidió el acceso al país a través de las terminales aéreas, un incremento de 38 por ciento con respecto a 2015. Esta cifra advierte una gran deuda en el acceso a la protección internacional, señala el informe.

El GAM está integrado por las organizaciones American Friends Service Committee, Asylum Access México, la Casa del Migrante de Saltillo, el Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova, la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, el Programa Casa Refugiados, Sin Fronteras y la Coalición Internacional contra la Detención.