En cerrado duelo derrotó 15-10 a los Halcones y se instaló en la final de la Nacional
Nick Foles comandó el ataque terrestre; Matt Ryan y Julio Jones estuvieron a punto de dar la voltereta
Jack Elliot realizó el gol de campo más largo en la historia de las Águilas en playoffs
Domingo 14 de enero de 2018, p. 9
Filadelfia.
Las Águilas de Filadelfia levantaron el vuelo con una defensiva y un ataque terrestre que le dio la victoria por 15-10 y eliminar a los subcampeones de la NFL, los Halcones de Atlanta, a la espera del rival que enfrentarán en la final de la Conferencia Nacional entre los Vikingos de Minnesota y Santos de Nueva Orleáns, que pelearán el boleto este domingo.
Trece años pasaron para que el conjunto local llegara a estas instancias, aunque en esa ocasión se deshicieron del mismo rival que enfrentaron este sábado (27-10) para llegar a su segundo Supertazón en su historia y perder la final contra Patriotas de Nueva Inglaterra (24-21).
Filadelfia cerró la temporada regular con una de las mejores defensivas de la liga y se instaló como el mejor equipo de la Nacional (13-3) y monarca de la División Este, por encima de favoritos, incluyendo a Atlanta (10-6), que sufrió para calificar en el Sur en un sector muy pe- leado ganado por Nueva Orleáns y por detrás de las eliminadas Panteras de Carolina.
El mariscal Nick Foles movió el balón con su equipo y todo fue por tierra. No se desesperó y estuvo a punto de conseguir una anotación por él mismo, pero la jugada fue invalidada en el segundo periodo cuando los Halcones iban arriba 3-0 con el gol de campo de Matt Bryant, de 33 yardas.
Vendría otra ofensiva de las Águilas y la anotación de LeGarrette Blount que puso el marcador 6-3. El novato Jake Elliot falló el extra, ya después y con el partido avanzado festejaría con los equipos especiales los tres goles de campo que acertó.
El segundo fue el más largo de la historia de Filadelfia, uno de 53 yardas, porque el otro par lo haría en el tercer cuarto con 37 para dejar la ventaja a su equipo (12-10) y el tercero en el último periodo, de 21, que dejó la pizarra final 15-10. Las banderas blancas de los seguidores en el Lincoln Financial Field ondearon. Nunca perdieron la confianza y gritaban sacando humo de sus bocas por el intenso frío. Desde la banca, Carson Wentz, quien llegó con muletas, miraba atento a su suplente Foles y alentaba a sus compañeros.
De los 30 pases que realizó Foles, 23 fueron efectivos y totalizó 246 yardas. No es un improvisado, tiene experiencia en playoffs, cuando comandó al conjunto a ganar su división en 2013.
La pesadilla
Los Halcones con un Matt Ryan cada vez más inseguro –tal parece que no supera la pesadilla de haber perdido el Supertazón 51 con esa remontada de 25 puntos que le propinó Patriotas–, no logró la ansiada anotación casi al final del encuentro por más que intentó conectarse con Julio Jones, quien dio un impresionante salto en la esquina de la zona roja y el ovoide pasó entre sus manos con un rival que lo presionó. Esa atrapada pudo haber cambiado el rumbo del partido a 1.05 minutos de la conclusión, pero no se concretó.
Las Águilas recibirán en su casa al ganador del partido entre Minnesota y Nueva Orleáns, que juegan este domingo.
El entrenador de Vikingos, Mike Zimmer, sigue incierto y no toma la decisión sobre el estatus del mariscal Sam Bradford en un intento por salir de la lista de jugadores reservas lesionados.
Case Keenum será el quarterback titular de los Vikingos frente al veterano Drew Brees, de Santos.