Domingo 22 de diciembre de 2013, p. a16
El cuerpo es la materia, lo táctil. Pero en el erotismo y el deseo carnal intervienen elementos etéreos como los vapores sexuales que son excitantes hasta cierto punto, pues desnudan la intimidad de los participantes
. Sin ser un libro de recetas, este ensayo sobre el erotismo resalta la importancia de los sentidos como elementos indispensables para realzar la libido de manera sutil y precisa. Todo con el propósito de saber interpretar el lenguaje del nuestro organismo, para así poder encauzarlo hacia el placer de los implicados en tan satisfactorio acto. Rituales del deseo, Andrés de Luna, Ediciones B, 330 pp.