La nube de ceniza se dirige hacia Los Ríos; afectados, 13 aeropuertos en Argentina
Martes 7 de junio de 2011, p. 23
Santiago, 6 de junio. El gobierno de Chile desalojó a 4 mil personas de las localidades cercanas al volcán Puyehue, en el sur del país, cuya actividad incandescente continuó hoy con la afectación de varias ciudades de la Patagonia argentina, que paralizaron su actividad por tercer día consecutivo y se mantienen en estado de alerta.
El gobernador de la localidad de Ranco, Eduardo Hölck, lamentó que haya familias que no quieren abandonar sus hogares para no dejar a sus animales, mientras el viceministro del Interior, Rodrigo Ubilla, precisó que las toneladas de cenizas comenzaron a caer en ríos aledaños y amenazan con aluviones.
La dirección del viento cambió en las últimas horas y la nube de humo y cenizas que emana del volcán, que en principio se dirigió hacia Argentina, va ahora hacia el sector de Futrono y el lago Maihue, en la sureña región de Los Ríos.
El Servicio de Geología y Minería mantiene la alerta en nivel 6 –moderada– mientras la Oficina Nacional de Emergencias sigue desde el sábado –cuando entró en erupción el volcán– en alerta roja para varias comunidades en las regiones de Los Ríos y de Los Lagos.
Ubilla, que se encuentra en la zona afectada, agregó que la columna de material volcánico, que alcanza diez kilómetros de alto, ha afectado la frontera con Argentina, en especial la ciudad de Bariloche, mientras varias ciudades de la Patagonia, ubicadas en las provincias de Río Negro, Neuquén y Chubut, paralizaron nuevamente sus actividades.
Pese a que la nube de cenizas comenzó a disiparse en la Patagonia, las clases, el tránsito por un paso internacional y los vuelos a la zona fueron suspendidos. Trece aeropuertos argentinos se mantienen cerrados o cancelaron parte de sus operaciones. Algunas comunas, como San Carlos de Bariloche, continúan en emergencia.
De otro lado, en Arizona, Estados Unidos, un incendio forestal que desde hace ocho días sigue sin control en la zona montañosa de The Wallow ha obligado a más de 2 mil 200 personas a huir de la zona, donde las llamas han calcinado más de 800 kilómetros cuadrados de bosques.