Número 171
Jueves 7 de Octubre
de 2010
Director fundador
CARLOS PAYAN VELVER
Directora general
CARMEN LIRA SAADE
Director:
Alejandro Brito Lemus
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Alergias: reacciones a un ataque inexistente |
Tres de cada diez mexicanos han sufrido alergia en algún momento de su vida. Los estornudos, la urticaria, la secreción nasal o el lagrimeo pueden no ser mortales, pero merman la calidad de vida de las personas. Por fortuna, existen tratamientos que pueden controlar el padecimiento.
Mario Alberto Reyes
Las relaciones sexuales de Lorena eran intensas y placenteras. La empatía con Gonzalo, su pareja, era total. Sin embargo, tras el orgasmo, acompañadas de una gran comezón, grandes ronchas aparecían en su piel.
Poco había cambiado desde la última cita con el alergólogo, con quien había acudido meses atrás.Tras una serie de análisis, el experto descubrió que Lorena era alérgica a la Coca Cola. La recomendación, alejarse de la gaseosa. El resultado, una notable mejoría en su salud.
Por eso, ahora resultaba incomprensible el regreso de las ronchas y la comezón. Otra vez los exámenes y las pruebas. Descubrieron que el semen de Gonzalo era el causante del problema. El refresco había sido prohibido para Lorena, no para él, y las pequeñas cantidades de la gaseosa contenidas en la secreción, ocasionaban el regreso de la urticaria. ¿El tratamiento? Gonzalo no debe ingerir refresco antes de la relación sexual.
Lorena pertenece al 30 por ciento de la población mexicana que en algún momento de su vida ha padecido alguna alergia, es decir, una reacción de hipersensibilidad a diferentes estímulos como pólenes, hongos, ácaros, polvo, alimentos, caspa de animales o medicamentos.
“Las alergias más comunes en los mexicanos son el asma, la rinitis alérgica y la dermatitis atópica. En México, 10 por ciento de la población es asmática, y 30 por ciento de los alérgicos experimentan rinitis alérgica”, explica en entrevista con Letra S, Carlos León Ramírez, director del Centro de Asma y Alergia de México.
Descarta debilidad en los sistemas inmunológicos de las personas alérgicas, pero sí hay diferencias en sus defensas que las llevan a desarrollar “respuestas exageradas a factores que son normales para la mayoría”.
El alergólogo, egresado del Instituto Politécnico Nacional, menciona que para desarrollar una alergia debe existir una predisposición genética, así como un medio ambiente desfavorable que permita el contacto con los alergenos.
Comezón, estornudo, escurrimiento de moco y nariz tapada, son los síntomas inconfundibles de la rinitis alérgica, más frecuente que el asma pero menos grave, señala el experto.
“En el caso de la rinitis alérgica, si los padres la padecen, los hijos tienen entre 50 y 70 por ciento de probabilidades de desarrollarla. Si sólo uno de ellos la tiene, entonces la posibilidad para los descendientes se reduce a 30 por ciento, y si ninguno de ellos tiene alergias, los hijos únicamente tienen cinco por ciento de oportunidad de adquirirla”.
Afecta a tres de cada diez mexicanos
León Ramírez señala que la mayoría de las personas afectadas por esta alergia presentan comezón, enrojecimiento y lagrimeo en los ojos, así como fotofobia, es decir, molestia ante los rayos del sol.
Sobre el asma, el experto la define como una enfermedad crónica inflamatoria de los bronquios cuyos síntomas son tos, silbido de pecho y falta de aire. Generalmente, agrega, ocho de cada 10 infantes la desarrollan durante los primeros cinco años de vida.
Cuando la piel experimenta inflamación crónica, fuerte comezón, enrojecimiento y lesiones, lo más probable es que esté siendo afectada por la dermatitis atópica. Se manifiesta principalmente en mejillas, región posterior de las orejas, cuello y tórax.
Aunque 3 de cada 10 mexicanos han tenido alguna alergia, son pocos los que han buscado atención médica, señala Carlos León. Subraya que buena parte de quienes acceden a los servicios de salud se caracteriza por tener un mayor grado educativo y socioeconómico, pues los medicamentos son caros, aunque destaca el papel que sus colegas desempeñan en las instituciones de seguridad social.
Hasta en la cama
El experto apunta que las alergias afectan la libido y orgasmo de los alérgicos, pues las costras, llagas, ronchas, heridas o comezón provocan vergüenza en quienes las portan. Por ejemplo, un asmático puede estar “absolutamente incapacitado” para tener contactos sexuales, pues lo que se requiere es permanecer inmóvil para no gastar oxígeno. “Por eso es que las alergias son enfermedades que no matan pero no dejan vivir”.
S U B I R
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