La Asamblea Legislativa del Distrito Federal rechazó tajantemente la propuesta del presidente, Felipe Calderón, para crear el Sistema de Seguridad para el Distrito Federal, pues representa una abierta intromisión al gobierno capitalino, por lo que emprenderá una defensa jurídica ante esa pretensión.

De acuerdo con la presidenta de la Comisión de Gobierno de la ALDF, Alejandra Barrales, entre los juristas a los que se pedirá apoyo está el constitucionalista Diego Valadés, así como otros litigantes que están también en este momento auxiliando a este órgano legislativo para enfrentar la controversia constitucional interpuesta por la Procuraduría General de la República contra los matrimonios gays.

Manifestamos nuestra inconformidad, nuestro rechazo, al trato que de nueva cuenta se está dando a la capital con esta iniciativa, pues no se respeta nuestro marco político, el marco de actuación de nuestras autoridades, pero además de eso lo que más preocupa es que se quiera tratar al Distrito Federal de la misma manera que lo han hecho con Ciudad Juárez, en términos de seguridad, expresó.

La legisladora añadió que es evidente que Calderón ha demostrado no tener la capacidad para poder controlar la delincuencia, el narcotráfico y las continuas muertes que se registran por todo el país.

Nos preguntamos si es burla o de qué estamos hablando cuando vemos debilidad, y que se pretenda ahora hacerse cargo de la seguridad del Distrito Federal desde el gobierno federal, añadió.

Hizo énfasis en que ante la afectación que podría tener para esta ciudad la iniciativa calderonista se harán las consultas jurídicas que se requieran con los especialistas en esa materia y se adoptará una estrategia que coadyuve a que se respete al Distrito Federal y siga siendo la autoridad de este lugar la que, en coordinación con las federales, sea responsable de tomar las decisiones que más convengan a los capitalinos en materia de seguridad pública.

–¿Cómo afectará esa iniciativa el proceso de reforma política para el Distrito Federal?

–Es un hecho que esa actitud demuestra de nueva cuenta que es urgente que vayamos a la reforma política del Distrito Federal, porque se requiere hoy más que nunca darle autonomía, darle facultades al gobierno de esta ciudad, tal como lo tienen los de otros estados para decidir sobre sus propias cuestiones en materia de seguridad pública.