Sorpresa por nombramiento

os capitalinos que –en diferentes disciplinas– integramos el campo cultural, nos encontramos algo destanteados con el nombramiento de Teresa Vicencio como directora del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) en sustitución de María Teresa Franco, a quien conocimos previamente como directora del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Franco fue la primera mujer en ocupar la dirección general del INBA y su nombramiento no dejó de provocar sorpresas, pues la identificábamos con su anterior gestión. No obstante, fue ampliamente aceptada por numerosos sectores. De Teresa Vicencio sólo muy recientemente sabemos de su gestión en el CECUT, sus nexos familares con el Partido Acción Nacional y su formación académica en la Universidad del Claustro de Sor Juana, aparte de otros desempeños en bibliotecas y programas de radio . Una discreta encuesta entre artistas plásticos y académicos de la UNAM, la UAM , el Poli y la Ibero me permitió constatar que es desconocida en esos medios consabidos. Eso no quiere decir que en principio se le objete, cosa que, al no conocerla, supondría suma incoherencia. Sin embargo, yo pienso en otros directores del INBA, todos ampliamente conocidos desde antes de su nominación para ocupar el cargo. Guardo especial y muy grata memoria de varios de ellos, como José Luis Martínez, un intelectual y autor de primera línea, y también de Sergio Galindo, entre otros. La ley del INBA (ya no en función) exigía que la persona a ocupar la dirección tuviera amplio relieve artístico-cultural. Por eso el compositor Carlos Chávez fue el primer director. El INBA es un trasatlántico difícil, eso ni duda, pero su representante ante las comunidades cumple –entre muchas otras funciones– precisamente la de representar al máximo organismo nacional del país en materia de artes y literatura. No nos ha sido posible calibrar la decisión de las autoridades competentes acerca del inesperado nombramiento. Ojalá pronto se emitan luces al respecto, de lo contrario podría suponerse que se trata de una acción partidista.

n México y en muchas otras partes del mundo los procesos de transformación democrática han sido impulsados por la sociedad civil, categoría que comprende las diversas formas de organización social, por cuyo conducto el pueblo ejerce de manera concreta su soberanía. El inacabado proceso de transición a la democracia; la proximidad de un año tan significativo, por celebrarse el segundo centenario de la Independencia y el primero de la Revolución; la crisis contemporánea y otros signos históricos actuales, llevaron a organizaciones civiles de diversos estados de la República, integradas en la Alianza Democrática de Organizaciones Civiles (ADOC), a reunirse en días pasados en la ciudad de Oaxaca para hacer un balance de lo realizado y plantearse nuevos horizontes. De los materiales preparatorios y de las discusiones realizadas se desprenden múltiples retos para su actuación en el futuro próximo, los cuales pueden sintetizarse en cuatro.

a Ley Federal del Trabajo en su artículo cuarto señala diversas conductas patronales, como ofensas a los derechos de la sociedad, cuando se impide el ejercicio de derechos laborales fundamentales, en particular el de huelga. Esta dura sentencia parte de la premisa de que la comunidad en su conjunto, no sólo trabajadores y sindicatos, son los lesionados. Dos empresas han incurrido recientemente en este agravio: Mexicana de Cananea, SA de CV, del Grupo Minera México, y la trasnacional alemana Continental Llantera Potosina, SA de CV.

a gran industria farmacéutica se ha destacado siempre por la búsqueda inescrupulosa de lucro. Por muchos años fue el sector industrial con mayor porcentaje de ganancias. Al 2008, diez empresas controlaban 55 por ciento del mercado global de farmacéuticos: Pfizer, GlaxoSmithKline, Sanofi-Aventis, Roche, AstraZeneca, Johnson & Johnson, Novartis, Merck, Wyeth (engullida por Pfizer en 2009) y Lilly.

oticias frescas sobre Bolivia llegaban en la mañana de hoy jueves 9 de abril a través de un canal boliviano de televisión y reflejaban tensión en el país.