El volumen se presenta hoy en la feria del Palacio
de Minería
Dedican un libro al ''ininterrumpido diálogo''
entre Veracruz y La Habana
Se trata de una geografía histórica, social
y cultural elaborada por 22 investigadores de ''las dos orillas'' Irrenunciable
e indestructible, esa hermandad, escribe Leal Spengler
Los puertos de Veracruz y La Habana, por siglos, han unido
sus destinos. Y esa simbiosis es el tema central del libro La Habana/Veracruz.
Veracruz/La Habana. Las dos orillas, coordinado por Bernardo García
Díaz y Sergio Guerra Vilaboy, publicado por las universidades Veracruzana
y de La Habana, que ofrece en 513 páginas un encuentro historiográfico.
Veintidós investigadores de ''las dos orillas"
elaboran la geografía histórica, social y cultural de dos
ciudades que sirvieron de punta de lanza para los conquistadores, comerciantes,
aventureros y corsarios en la conformación del continente. Urbes
invadidas que compartieron y disputaron las rutas del comercio del Atlántico;
puntos de mestizaje y puertos de llegada y salida de quienes conformarían
la naciente América. Puertos caribeños que se hermanaron
en el dolor y el canto, en el sabor y la cultura, la fiesta y el comercio.
''Si yo no fuera cubano, quisiera ser mexicano", se lee
en el epígrafe con el que abre el libro, palabras del prócer
José Martí que sintetizan el encuentro bicultural del que
dan cuenta sorprendente esa obra en una historia no contada hasta ahora.
''A investigar este ininterrumpido diálogo está
dedicado este volumen, que celebra los nexos que han enriquecido mutuamente
a las dos ciudades", escribe en la presentación Víctor Arredondo,
rector de la Universidad Veracruzana.
Eusebio Leal Spengler, historiador de la ciudad de La
Habana y especialista en restauración de edificios históricos,
escribe en el prólogo del libro: ''He aquí su esencia y la
convicción íntima de sus autores, que acuden a forjar con
reflexión intensa y juiciosa los fundamentos de una hermandad irrenunciable
e indestructible".
Espejo caribeño
Investigadores cubanos y mexicanos establecen un duelo
de datos y apreciaciones: las dos orillas, cual espejo caribeño
de ese "mediterráneo americano". Sus coordinadores, García
Díaz (cronista de Veracruz) y Guerra Vilaboy (historiador cubano),
asienten en que los puertos ''tienen un larga historia de encuentros y
similitudes que hunden sus raíces en los albores de la dominación
colonial española. Las dos villas fueron fundadas casi al mismo
tiempo (...) Sometidas ambas ciudades a las amenazas de corsarios, piratas
y flotas de las potencias rivales de España, en ellas se edificaron
murallas, fortalezas y baluartes".
Compartieron un preso ilustre: Servando Teresa de Mier,
inquilino de San Juan de Ulúa y el Castillo de la Fuerza en La Habana.
Fortalezas que en sus respectivas historias fungieron como sedes del Ejecutivo.
Benito Juárez abrió el puerto de Veracruz a la ''beligerancia
de los patriotas de la isla el 3 de abril de 1869; José Martí
caminó por las calles de Veracruz; Julio Antonio Mella visitó
Veracruz en los años 20, y Fidel Castro partió de Tuxpan
en el Granma. Agustín Lara cantó a ese rinconcito
de Cuba, al tiempo que Nicolás Guillén se matrimoniaba con
la veracruzana Rosa Portilla''.
(La Habana/ Veracruz. Veracruz/ La Habana. Las dos
orillas se presenta hoy a las 16 horas en el salón de los rectores
del Palacio de Minería dentro de la feria del libro que allí
se desarrolla.) AGENCIA TODOCULTURA
Barco que ilustra la portada del libro La Habana/ Veracruz.
Veracruz/ La Habana. Las dos orillas; integrantes del legendario Trío
Matamoros, en la bahía de la capital de Cuba; comparsa del carnaval
de 1941, donde se aprecian los instrumentos tradicionales de los conjuntos
cubanos, y Toña la Negra durante su participación
en un festival de Santa Rosa, Veracruz FOTOS TOMADAS DEL LIBRO LA
HABANA/ VERACRUZ