Agustín Rodríguez orienta el discurso a aceptar la oferta de 4.3% de aumento salarial
Dirigencia del STUNAM, por no a la huelga
Desde ayer promueven su posición entre las bases; hoy tomarán la decisión en las urnas
KARINA AVILES
El consejo general de huelga del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM) determinó ayer promover entre sus bases el no estallido de la huelga en la máxima casa de estudios.
Hoy, desde las 8.30 de la mañana, los trabajadores universitarios acudirán a las urnas en las distintas dependencias para votar por sí o no al paro, y en la noche, el consejo dará a conocer la determinación final, que se prevé sea la de no colocar las banderas rojinegras.
El pleno del consejo sesionó para determinar la "orientación política" que desde ayer mismo los delegados llevaron a las asambleas delegacionales. Desde el inicio del pleno, en el auditorio Alfonso Caso, el secretario general del STUNAM, Agustín Rodríguez, marcó la "orientación".
Aunque dijo que había tres escenarios: estallar la huelga, irse a una prórroga del emplazamiento y aceptar la propuesta de 4.3 por ciento de incremento salarial y 1.5 en prestaciones, su discurso se concentró en argumentar en favor de tomar la oferta económica.
"La aceptación de la propuesta permite preservar y mantener en la luz al STUNAM, y continuar la lucha con el conjunto del sindicalismo universitario para lograr un incremento superior al asignado en la Cámara de Diputados". Incluso, señaló que en el momento en que se diera un aumento, éste tendría que aplicarse "automáticamente" a lo ya obtenido.
Advirtió que irse a una prórroga del emplazamiento conllevaría riesgos. Entre ellos, renunciar a la reubicación de 17 puestos en el tabulador y "al movimiento horizontal de más de 10 mil trabajadores, quienes tendrían un incremento conforme lo planteado".
Pero sobre todo, dijo, significaría renunciar al 4.3 por ciento de aumento, ya que nada garantiza que con la prórroga se logre una oferta mejor y, en cambio, ésta podría ser en "detrimento" de lo logrado, en razón de que todo indica que para el próximo año los salarios irán a la baja.
Con esta "orientación" comenzaron las argumentaciones de los sindicalistas en el pleno; unos repitieron el discurso de Agustín y, otros, de las corrientes disidentes, como Pablo Gómez, se inclinaron por la prórroga. También hubo quienes hicieron el intento de analizar lo que significa la propuesta económica.
Marcelino González, delegado de jefes de servicio, señaló a sus compañeros que en los 17 puestos que se van a retabular está el menor número de trabajadores, quienes son los que obtendrán, por la misma razón, mayor incremento, mientras que al grueso de los empleados apenas se les otorgará 4.3 por ciento de aumento.
En esos 17 puestos están ubicados, por ejemplo, "los 38 trabajadores con posgrado; los profesionistas, que son 200; los jefes de servicio, que son 400... Pero en el grueso están los auxiliares de intendencia, que son 5 mil; los de vigilancia, que son 3 mil, y que no van a tener ninguna retabulación". En síntesis, afirmó, son "más de 15 mil" los que no tendrán un incremento más allá de 4.3 por ciento.
En medio de chistes, burlas hacia sus compañeros y pláticas que se ocupaban más por oír las grillas que por lo que decían en el estrado los oradores, se escuchaban por ahí los debates locales de butaca a butaca. Una trabajadoras gritó a una de sus compañeras, en el momento en que ésta pasaba frente al estrado con una cartulina donde pedía 100 por ciento de aumento al vale de despensa: "šQue vaya a talonearle, guevonaaa!, no va a las marchas y ahí está pidiendo aumento".
Finalmente, el consejo de huelga pasó a la votación. Sólo ocho votos fueron en favor de orientar a los trabajadores para colocar las banderas rojinegras. Se alzaron algunas manos en apoyo de la prórroga, y la mayoría dijo no a la huelga. Hoy, alrededor de las 8 de la noche, se espera que se den a conocer los resultados de la votación.