La religión no admite comprobación científica, dice
Canonizar a Juan Diego no demuestra su existencia: Nebel
La Guadalupana gana vigencia con la globalización porque se repite la explotación de los pobres, dice el especialista
ALIA LIRA HARTMANN CORRESPONSAL
Bayreuth, Alemania, 31 de julio. De cara a la canonización de Juan Diego, ceremonia presidida por Juan Pablo II este miércoles en la Basílica de Guadalupe, el teólogo Richard Nebel (1946), especialista en religiosidad y mestizaje en América Latina explica a La Jornada la importancia del acontecimiento guadalupano en la vida cultural y religiosa de México.
-ƑPor qué se interesa como teólogo e investigador en el fenómeno guadalupano?
-Porque mediante mi esposa Irma Ochoa tuve mis primeros contactos con la cultura mexicana. Ninguna otra nación posee un símbolo con la fuerza religiosa, cultural y social de la Virgen de Guadalupe, que aglutina a los mexicanos y les da identidad. En tiempos de ''globalización" es el faro que muestra nuevos caminos para la convivencia de los pueblos y la justicia social.
Fenómeno guadalupano y no juandieguino
-ƑCuál es su opinión sobre la canonización de Juan Diego?
-El fenómeno es guadalupano y no juandieguino. Como católico aprecio las grandes tradiciones de fe y fervor guadalupanos. Juan Diego representa en el Nican Mopohua, fuente principal secundaria de la tradición guadalupana, al pueblo sometido, al que la Virgen da un lugar digno en la sociedad colonial. En los tiempos actuales, en que se repite la explotación del pueblo por los poderosos, este símbolo gana en actualidad. Con la canonización de este ''visionario" se pone de relieve el reconocimiento de los pobres y sencillos que la Virgen de Guadalupe les otorga por medio de Juan Diego.
-En su libro Santa María Tonantzin concluye que no hay fuentes primarias sobre la existencia de Juan Diego. ƑPodría explicarnos lo de las fuentes primarias?
-Desde el punto de vista científico la canonización no resuelve el problema de la ''existencia" de Juan Diego, pues no hay ninguna fuente primaria, es decir, no hay documentos originales escritos por él ni por sus contemporáneos. Las fuentes ''secundarias" de épocas siguientes no dicen nada concreto sobre su carácter y personalidad. Las características con las que lo describen no son nada único ni personal, son las de cualquier ''santo" de la época medieval europea cristiana. Hasta los años 80 del siglo XX no había ninguna tradición piadosa, ni leyendas ni milagros ni pinturas que representaran a Juan Diego sin la Virgen de Guadalupe en la religiosidad popular. Los ''documentos originales" que han ''aparecido" no tienen relevancia.
-ƑQué puede decir a los que ahora creen en Juan Diego como un santo?
-Los misterios de toda religión, milagros, apariciones, etcétera, no se pueden comprobar de manera científica, pues constituyen la mística de la religión, que corre el peligro de perderse cuando se quiere llevar estos motivos por el camino científico y hacer de la religión una ciencia comprobable. No desmitifiquemos el misterio de Guadalupe y Juan Diego para que siga viviendo en los corazones de cada mexicano.
Richard Nebel coordinará del 2 al 7 de septiembre, en la Universidad de Guadalajara, el foro El santo Juan Diego y la Virgen de Guadalupe: actualidad y controversia de una devoción, y será conferencista en el festival cultural sobre México Mex-Artes Berlín.