Ciudad de México. Durante agosto, el consumo privado tuvo un retroceso de 0.3 por ciento con respecto al mes inmediato anterior, dio a conocer BBVA México.
Al presentar el indicador de consumo del banco, medido por la cantidad de transacciones que se realizan en sus sistemas, la institución refirió que pese a la disminución del gasto observada durante el periodo, el consumo en terminales punto de venta aún se ubica por arriba de su nivel de mayo, el mes previo a la semana de descuentos por el Hot Sale.
También, dijo, el nivel de movilidad se mantiene todavía por arriba de ese mismo umbral con lo que anticipa que el consumo muestre resiliencia en los siguientes meses, ante las ganancias acumuladas en salario real y la masa salarial real.
Por componentes, enfatizó, el gasto en bienes redujo 1.3 por ciento, con una caída en el segmento de alimentos de 2.2 por ciento y una variación positiva en el gasto de bienes para el cuidado de la salud, de 3.7 por ciento, la mayor desde marzo de 2023.
Con los datos de agosto, precisó BBVA, el consumo en bienes se encuentra 7.1 por ciento por arriba de su nivel de diciembre de 2022.
A su vez, detalló, el segmento de servicios creció 0.9 por ciento, con una variación de 1.7 por ciento en el componente de servicios de entretenimiento, y caídas de 4.9 por ciento y 3.3 por ciento en los sectores de restaurantes y hoteles, respectivamente.
No obstante, la ralentización en los servicios turísticos se vio acompañada por una reducción en el gasto en aerolíneas de 3.5 por ciento.
En lo que se refiere al gasto por tipo de establecimiento, el consumo en internet creció 0.9 por ciento, y se ubica 15.4 por ciento por arriba de su nivel de diciembre del año pasado.
Por su parte, el consumo en establecimientos físicos redujo 0.6 por ciento, y ahora se pone en un nivel 9.2 por ciento por arriba del registrado en diciembre de 2022.
En materia de movilidad, el gasto en gasolina se mantuvo sin cambios respecto al consumo registrado en julio, en un nivel 6.3 por ciento por arriba del observado al cierre de 2022.
“Anticipamos que el consumo extenderá su resiliencia hacia la segunda mitad del año, ante el buen dinamismo del ingreso formal y el empleo, con cambios en los patrones de gasto de los hogares hacia menor ahorro financiero”, precisó BBVA.
Agregó que se estima que los datos de la segunda mitad del año definirán un buen punto de partida para la demanda interna en 2024, que podría enfrentar menor dinamismo de la demanda externa durante el primer semestre de ese año, en un entorno de altas tasas de interés y apretamiento de las condiciones de financiamiento.