Caracas. Las fuerzas armadas de Venezuela desalojaron a más de 11 mil 500 mineros irregulares de la reserva natural más grande del país, informó ayer el jefe militar a cargo de las operaciones.
Fueron expulsados quienes de manera arbitraria se encontraban ejerciendo la destrucción sistemática y sostenida del medio ambiente en el parque de Yapacana, en el sur del país, indicó el general Domingo Hernández Lara, jefe del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada, en la red social X.
Los mineros desalojados han incurrido en “tala, quema de bosques, contaminación de las fuentes hídricas y perforaciones subterráneas”, mediante “el uso de mangueras de alta presión y maquinarias para remover la capa vegetal, y el uso de agentes contaminantes, entre otros”, detalló el jefe militar.
Entre los mineros hay extranjeros, aseguró Lara, aunque no especificó las nacionalidades.
El defensor de pueblo de Colombia advirtió a mediados de junio a la cancillería del país que debían adoptarse “mecanismos que garanticen el debido proceso y el derecho a la defensa de los connacionales detenidos en operativos militares venezolanos en las minas auríferas de Yapacana”.
También exhortó a las autoridades de los departamentos de Vichada y Guainía, fronterizos con Venezuela, a activar “planes de contingencia” ante la eventual “deportación” de unos 7 mil colombianos desde Venezuela.
El despliegue fue activado el 1º de julio como parte de la Operación Escudo Bolivariano Autana 2023 que la fuerza armada ejecuta en Yapacana, el parque más extenso del país con 320 mil hectáreas.
El pasado 4 de julio el presidente Nicolás Maduro dio a conocer que había ordenado el despliegue de la fuerza armada para contrarrestar el avance de la minería ilegal que “viene destruyendo la Amazonia de América del Sur”.
SOS Orinoco, ONG crítica con el gobierno, indicó que para agosto de 2023 unas 23 minas ilegales afectaban 3 mil 316 hectáreas del parque Yapacana.