Acapulco, Gro. El Centro de Derechos Humanos Tlachinollan informó que fue suspendida la audiencia de vista programada para este lunes por la mañana, en la cual se reiniciaría el proceso para dictar sentencia en el caso de Inés Fernández Ortega, mujer indígena que sufrió tortura sexual durante una irrupción militar en el estado de Guerrero en marzo de 2002, en la comunidad Barranca Tecoani, municipio de Ayutla.
El abogado de Tlachinollan, Rogelio Téliz García, explicó que la sentencia condenatoria contra un militar acusado, emitida en marzo pasado, fue anulada, por lo que se tuvo que reiniciar el procedimiento.
Al salir de las instalaciones del Poder Judicial Federal (PJF), en el bulevar de las Naciones, alrededor del mediodía, acompañado de Inés Fernández, Téliz García explicó que durante la fase de investigación, el Ministerio Público no recabó las cédulas de los abogados defensores del militar.
Debido a ello, el Tribunal colegiado de apelación ordenó al juzgado de distrito recabar las cédulas de los profesionistas, cancelar la sentencia, y nuevamente cerrar el proceso para dictar sentencia.
Téliz García indicó que en la audiencia de este lunes, en el segundo juzgado de distrito, se iban a ratificar las conclusiones para integrar el proyecto de sentencia.
Advirtió que "al día de hoy no hay sentencia", y recordó que se trata de un proceso penal que inició en 2013.
Téliz García manifestó que "el juzgado federal no convalidó la fecha, es un retraso doloso del PJF, pues no avisó de la reposición del procedimiento".
El abogado sintetizó que en octubre pasado concluyó el juicio y en marzo se dictó sentencia, pero el militar acusado interpuso un recurso de apelación.
Téliz García señaló que "el juzgado no notificó de la suspensión de la audiencia, lo cual implica la violación a la exigencia de justicia de doña Inés, pues aún no hay sentencia contra la persona que cometió tortura sexual".
Inés Ortega, acompañada de la intérprete Matilde Albino Jiménez, lamentó que "el Estado no ha cumplido como se debe, lo único que yo pido es que se haga justicia, he sufrido mucho, he tenido que caminar desde mi comunidad para llegar al juzgado".
Agregó que "me intriga lo que ha pasado, que el Estado mexicano no ha cumplido la sentencia que se había venido plasmando desde ese tiempo, sólo pido que se respete".