México y Argentina firmaron ayer un acuerdo de cooperación en materia de esclarecimiento y construcción de memoria pública sobre graves violaciones de derechos humanos perpetradas en ambas naciones. En el caso de nuestro país, tiene que ver con los trabajos de la Comisión para la Verdad sobre los hechos de la guerra sucia en el periodo de 1965 a 1990.
Al término de las mesas de trabajo que se realizaron desde el pasado lunes, el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas, destacó el aprendizaje obtenido para definir líneas de trabajo y cooperación bilateral, como parte de una política que pone en el centro la dignidad y las garantías fundamentales de las personas. “Ha sido un aprendizaje muy útil que nos ha abierto líneas de trabajo y de cooperación bilateral muy importantes en una causa que compartimos profundamente, que es el derecho a la verdad y a la memoria".
En tanto, el embajador de Argentina en México, Carlos Tomada, celebró que este acercamiento haya sido una confirmación del estado general de las relaciones bilaterales, así como de la vocación de ambas naciones de hacerlas crecer y fortalecer. “A eso apostamos. Es evidente que en este tema en particular tenemos una historia común marcada por la experiencia lamentable de regímenes autoritarios y violación de garantías fundamentales”, expuso.
El jefe de gabinete de la Secretaría de Derechos Humanos de la nación sudamericana, Nicolás Rapetti, destacó que a la delegación de su país le quedó clara la voluntad política del gobierno mexicano para avanzar en estos temas. Explicó que se elaboró una ruta de trabajo con el objetivo de lograr la identificación de personas desaparecidas, fortalecer las capacidades de búsqueda y “todo lo que tiene que ver con archivos de memoria”. También, profundizar las líneas de investigación que interesan a ambos países, así como lograr un intercambio de archivos y documentación útil en procesos judiciales, entre otros.