Ciudad de México. El Colegio de Pilotos Aviadores de México (CPAM) exhortó a conformar una política de Estado en Aviación. Señaló que ante la serie de decisiones recientes “desafortunadas”, por parte de las autoridades aeronáuticas en torno al sector transporte aéreo nacional, muestran un preocupante grado de improvisación, disposiciones unilaterales y arbitrarias que están “perjudicando gravemente” la buena marcha de la industria aérea del país, consideró el presidente del Colegio de Pilotos Aviadores de México (CPAM), Ángel Domínguez Catzín.
Por ello, urgió a los diversos actores políticos y económicos a conformar una mesa de análisis que culmine con una política pública que perfile la solidez del sector en el largo plazo. Explicó que las decisiones recientes sobre la reducción de slots en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), sólo son una pequeña muestra de la improvisación con que se está gestionando al sector aéreo, pero, dijo, esto es apenas una pequeña porción de muchas otras cuestiones, que han lesionado gravemente a la industria aérea nacional.
Refirió, por ejemplo, a la degradación a categoría dos de la autoridad aeronáutica mexicana, que determinó la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), la cual después de 28 meses aún no ha sido remontada; los decretos de prohibición de las operaciones de carga en el AICM y de reducción de slots (tanto en el 2022 como en el 2023); la introducción de la figura del cabotaje en la iniciativa de Ley de Aviación, que tuvo que ser retirada, y la aprobación de esta Ley y la de Aeropuertos en abril pasado, hoy en análisis de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por cuestionamientos en su proceso de aprobación.
Al respecto, el CPAM aseguró que la única forma de hacerle frente a estas debilidades, es conformar una política pública, consensada en una mesa de negociación con los diversos actores de la industria y de la vida política y económica del país, para perfilar al sector aéreo nacional como un sector estratégico y prioritario, que pueda apoyar el desarrollo del país como una herramienta de competitividad global en el largo plazo.
Consideró que dicha política pública debe contribuir a desarrollar y a ampliar la cobertura de servicios de transporte aéreo, conforme a las necesidades nacionales, para garantizar la integración regional del país y la conectividad multimodal.
Apuntó que lo primero es contar con un marco normativo actualizado que brinde certidumbre jurídica y que tenga capacidad de actualización continua que dote a la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) de las facultades necesarias para garantizar los más altos niveles de seguridad operacional.
“Asimismo, es indispensable tener la infraestructura adecuada, condiciones de competencia que garanticen a los usuarios un servicio eficiente, seguro y accesible y un entorno de excelencia y profesionalización del personal técnico aeronáutico, utilizando para ello las mejores prácticas y la tecnología necesaria”.