Ciudad de México. Claudia Sheinbaum Pardo fue nombrada anoche coordinadora nacional de los comités de defensa de la Cuarta Transformación, lo que la convirtió en la virtual candidata presidencial de Morena, Partido del Trabajo y Partido Verde Ecologista de México.

La dirigencia nacional morenista dio a conocer los resultados de las cinco encuestas organizadas para definir este cargo. En el promedio de los ejercicios, Sheinbaum obtuvo 39.38 por ciento de las preferencias.

El segundo sitio fue para Marcelo Ebrard, quien no acudió a la presentación de los resultados luego de que denunció presuntas irregularidades y acusó que integrantes de su equipo fueron agredidos y se les impidió el acceso a la última fase del conteo. El ex canciller obtuvo en promedio 25.78 por ciento.

Le siguió el ex secretario de Gobernación, Adán Augusto López, con 11.18 por ciento, y muy cercano quedó el petista Gerardo Fernández Noroña, con 10.62 por ciento. En tanto, el verdecologista Manuel Velasco tuvo 7.16 por ciento, y el senador con licencia Ricardo Monreal, 5.86 por ciento.

Así concluyeron los más de dos meses de recorridos, seis días del levantamiento de las encuestas y una revisión de las actas y conteo que se prolongó 24 horas.

El cómputo final fue dado a conocer en el World Trade Center (WTC) de la Ciudad de México, que desde el lunes se convirtió en el búnker del partido guinda. Los aspirantes ingresaron poco antes de las 17 horas al centro de convenciones.

En privado, en uno de los cuatro salones que rentó Morena, el presidente del partido, Mario Delgado, y el líder del consejo nacional morenista, Alfonso Durazo, abrieron los sobres sellados que momentos antes les entregaron las cuatro casas encuestadoras contratadas, Mercaei, Buendía y Márquez, Heliga Consultores y De las Heras Demotecnia.

Claudia Sheinbaum se declaró lista para recibir del Presidente el bastón de mando e hizo un reconocimiento al Ejecutivo, a quien mencionó en varias ocasiones. Foto Marco Peláez.

Momentos después, los cinco aspirantes presentes, y los dirigentes de los tres partidos, llegaron a un salón adjunto donde se organizó la presentación. En las primeras tres filas estuvieron la plana mayor de los tres partidos, dirigentes, legisladores y el gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo, del PVEM.

Con el nombramiento como coordinadora de la defensa de la Cuarta Transformación, Sheinbaum “tendrá la responsabilidad de conducir a nuestro movimiento rumbo a 2024, siguiente etapa de la transformación histórica encabezada desde 2018 por nuestro queridísimo presidente Andrés Manuel López Obrador”, explicó Durazo al dar a conocer los resultados de las encuestadoras.

Al apuntar que el proceso “representa, por sí mismo, una contribución histórica al avance democrático de nuestro país”, defendió que “no hay ningún incidente que haya afectado de manera definitiva el resultado final”. Eventualidades sin mayor trascendencia.

Aunque reconoció que hubo “eventualidades”, insistió en que “ninguna de ellas tuvo el ánimo de manipular ni pudo incidir de manera definitiva, en el resultado final”.

La contienda interna también fue la primera “sesión del bastón de mando dentro del movimiento del que surge la Cuarta Transformación, consumando un proceso pacífico, democrático y abierto al pueblo”, agregó Delgado Carrillo.

Desde la madrugada, los equipos de los aspirantes y la propia dirigencia del partido reconocieron incidencias. Se detectaron urnas sin actas o con actas faltantes, que no contenían las firmas de los representantes, o con reporte de que fueron levantadas en casas con propaganda de algún aspirante.

En las mesas de revisión, y con el aval de los representantes, se determinó descartar muchas de ellas. El partido no presentó la cifra de boletas anuladas, que, trascendió, fue 14 por ciento.

Así concluyó el proceso interno que arrancó el 11 de junio con la convocatoria, además de recorridos de los aspirantes por el país que iniciaron el 19 de junio. Durazo llamó a toda la militancia de Morena y sus aliados a cerrar filas con la ganadora del proceso, a quien despidieron todos juntos con las manos tomadas y los puños en alto, bajo las consignas de “unidad, unidad”.